Tres meses han pasado desde que salió de su hogar en el Congo, África. Traslados en barco, en camiones, mucho caminar y más de 10 mil dólares gastados, todo por la esperanza del ‘Sueño Americano’.
Maudelet Sefort, de 25 años, es uno de los 49 africanos que se quedaron varados en la autopista Celaya-Querétaro desde el pasado lunes, porque el camión en el que viajaban desde Tapachula Chiapas se averió.
Todos retomaron su camino a Tijuana dese el pasado jueves, pero él se quedó solo en Querétaro, sin conocer a nadie, hablando poco español y sin dinero. En entrevista para AM, Maudelet platicó que durante cuatro días esperaron a que la empresa propietaria del autobús, a la cual pagaron 90 dólares por boleto, mandara otra unidad por ellos o la reparara, pero ninguna de las dos ocurrió.
Entonces, los que tenían o recibieron dinero por parte de sus familiares, fueron abordando camiones en pequeños grupos para continuar con su camino a Tijuana, el jueves por la tarde.
Pero Maudelet tuvo una suerte distinta, acudió a realizar una llamada telefónica a sus familiares del Congo para pedirles apoyo económico, y cuando regresó, los otros 48 africanos, entre ellos su primo Yves, ya no estaban.
Recibió el apoyo de Cruz Roja Celaya para ser trasladado a una casa de migrantes en Querétaro llamada ‘Toribio Romo’, de la Parroquia de San Pedro Apóstol.

Sólo quiere reunirse con su primo
Maudelet Sefort platicó que lo único que quiere es reunirse con su primo Yves en Tijuana, para juntos pasar a Estados Unidos y comenzar una nueva vida, pero no tiene dinero para el pasaje y su familia ya no puede apoyarlo más.
Y es que desde hace aproximadamente tres meses salió de su país de origen, viajó en barco hasta América, cruzó países como Brasil, Ecuador, Nicaragua y en cada uno hay que esperar tres o cuatro días para los trámites que les permitan pasar legalmente por los mismos.
Viaje que hasta ahora le ha costado más de 10 mil dólares pero su esperanza es llegar a Miami, Florida, en Estados Unidos y comenzar una nueva vida.
 

Lo ayudan para continuar su viaje
Una persona de Celaya que prefirió omitir su nombre y el padre Ariteo Olvera, encargado de la parroquia donde recibió refugio Maudelet Sefort, lo apoyaron con la compra del boleto de autobús para que continúe su camino a Tijuana y se reúna con su primo Yves.

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