Javier Torrente tiene esperanza, apela a que su equipo siga con vida en la eliminatoria tras la derrota de 0-1 en casa, algo que si bien es cierto, será difícil de confirmar en la vuelta a jugar en el Volcán Universitario.
La derrota dejó tocado al técnico esmeralda quien se dijo consciente de pensar en una final o en vacaciones una vez terminando el siguiente compromiso ante Tigres, aunque la historia juegue en su contra luego de 9 visitas de León y en ninguna poder ganar.
“Estamos vivos y las conclusiones las sacaremos luego de los siguientes noventa minutos, tuvimos una buena racha y bueno arrancamos esta no sería la mejor manera”, comentó Luis Javier Torrente.
Reconoció la entrega de sus jugadores pero también la tristeza que provocó la derrota con su gente.
“Confiar plenamente en el grupo es mi fuerte, lo que me da aliento para el siguiente encuentro es el temperamento la garra y el grupo en varios partidos donde complicamos, el equipo siempre mostró los dientes y trató de salir adelante”, comentó.
Simplificando la situación León debería de hacer dos goles en un principio, de ahí para arriba, cualquier victoria por un gol (2-1, 3-2, 4-3), le daría el pase por el gol de visitante que hiciera y consagraría la primera final de Javier Torrente en el futbol mexicano.
“Hay que trabajar la cabeza para que sintamos que vamos a una final y que vamos vivos sin marcar un gol, el rival no es nada determinante, ganar como mínimo 2-1 no daría la final”, finalizó Torrente.
La estadística nivela la misión que parece imposible, si bien León sólo ganó en tres de sus nueve visitas (3G-2E-4P), Tigres dejó escapar muchos puntos como local en el torneo regular (3G-4E-2P).