Decenas de personas se reunieron en el auditorio de la parroquia San Pio X, para deleitar sus oídos con el concierto de arpa paraguaya que ofrecieron los hermanos Leonel y Noya Olvera, del Conservatorio de Música de Durango.
El evento fue organizado por monseñor Juan Rodríguez Alba, como una oportunidad de convivencia familiar y de enriquecer el espíritu por medio de la belleza de la música.
“También es importante involucrarse en la música de calidad, como lo es el arpa, que tiene un nivel artístico muy bueno y que también alimenta y fortalece el espíritu”, dijo monseñor.
Los jóvenes músicos provenientes del Conservatorio de Música de Durango interpretaron piezas del folclor latinoamericano, como: “Moliendo Café”, de Hugo Blanco; “El Boyerito”, de Félix Pérez; “Jarabe Loco”, canción tradicional veracruzana; “Lejos de ti”, de Marco Trujillo y “Pedacito de Cielo”, canción venezolana.
“Estamos muy contentos de estar aquí, hace 10 años que venimos a la Basílica de Guanajuato a tocar para la virgen, en agradecimiento a un favor recibido y aprovechamos para aceptar la invitación del Padre Juan”, comentó Noya Olvera.
Paz y armonía envolvieron el auditorio que resguardaba a las familias que no pararon de ovacionar la interpretación del par de músicos.
Al finalizar el recital, Leonel y Noya, quienes ya se han presentado en el mismo recinto un par de veces, prometieron regresar a la ciudad.Decenas de personas se reunieron en el auditorio de la parroquia San Pio X, para deleitar sus oídos con el concierto de arpa paraguaya que ofrecieron los hermanos Leonel y Noya Olvera, del Conservatorio de Música de Durango.
El evento fue organizado por monseñor Juan Rodríguez Alba, como una oportunidad de convivencia familiar y de enriquecer el espíritu por medio de la belleza de la música.
“También es importante involucrarse en la música de calidad, como lo es el arpa, que tiene un nivel artístico muy bueno y que también alimenta y fortalece el espíritu”, dijo monseñor.
Los jóvenes músicos provenientes del Conservatorio de Música de Durango interpretaron piezas del folclor latinoamericano, como: “Moliendo Café”, de Hugo Blanco; “El Boyerito”, de Félix Pérez; “Jarabe Loco”, canción tradicional veracruzana; “Lejos de ti”, de Marco Trujillo y “Pedacito de Cielo”, canción venezolana.
“Estamos muy contentos de estar aquí, hace 10 años que venimos a la Basílica de Guanajuato a tocar para la virgen, en agradecimiento a un favor recibido y aprovechamos para aceptar la invitación del Padre Juan”, comentó Noya Olvera.
Paz y armonía envolvieron el auditorio que resguardaba a las familias que no pararon de ovacionar la interpretación del par de músicos.
Al finalizar el recital, Leonel y Noya, quienes ya se han presentado en el mismo recinto un par de veces, prometieron regresar a la ciudad.
Fomentan la unión a través de la música
Familias leonesas disfrutan de un concierto a cargo de los hermanos Leonel y Noya Olvera, provenientes del Conservatorio de Durango