Escondido a plena vista en una transitada calle del Distrito Financiero de San Francisco se encuentra uno de los laboratorios donde Samsung diseña los dispositivos que venderá en todo el mundo.
A diferencia de lo que se podría pensar, aquí no trabaja un mundo de gente, la fachada del edificio de ladrillos rojos no tiene el logotipo de la compañía y tampoco hay un sofisticado equipo de seguridad que vigile las instalaciones.
Esta es la primera vez que la empresa permite que medios de Latinoamérica visiten uno de sus Design Centers; eso sí, con la condición de no tomar fotos ni hacer check ni revelando su ubicación en redes.
En Samsung Design America trabaja un pequeño equipo de 27 personas cuya misión es adelantarse a las necesidades de los consumidores y crear el siguiente gran gadget (sin presión, ¿eh?), o bien, mejorar los existentes.
“Algo que nos distingue es que somos muy pequeños. Además, siempre buscamos que cada equipo esté conformado por gente de tres ámbitos: algunos que tengan un perfil de negocios, diseñadores de todo tipo, así como ingenieros que nos ayudan a hacer prototipos muy rápidamente. Estos equipos tan pequeños nos permiten trabajar e interactuar rápidamente y satisfacer estas tres áreas, que son importantes en caso de que el producto llegue al mercado”, explicó Sean Bornheimer, director de Estrategia de Producto en Samsung Design America.
El proceso que siguen para desarrollar un producto que después se lanzará en decenas de países es el siguiente: observar necesidades de usuarios y problemas a resolver incorporando tendencias futuras, después se hace la construcción de un prototipo y esa idea se vende a las oficinas centrales en Corea.
Este proceso lleva de 12 a 24 meses y en cada proyecto colaboran tres o cuatro personas; en total en el laboratorio se trabajan de cuatro a cinco ideas al mismo tiempo.
Aquí se idearon los audífonos Gear Circle, la pulsera de monitoreo de actividad física, Gear Fit, y también colaboraron para el desarrollo del Gear S e incluso los audífonos inalámbricos GearIconX.
Y si te preguntas cómo le hacen para construir estos gadgets que se venden por millones en el mundo, la respuesta está en su filosofía de trabajo y en la libertad creativa que tienen.
“Estamos orientados a la acción. En lugar de hacer muchos análisis, esperar y convencer a mucha gente, siempre intentamos construir primero, hacerlo tan rápido como sea posible. Nuestro equipo tiene mucha flexibilidad para tomar riesgos y eso es algo que equipos demasiado grandes no tienen; creamos, aprendemos y respondemos rápidamente.
“La mayoría de las ideas surgen de aquí. Pasamos mucho tiempo observando a la gente, tratando de empatar con ellos y usamos eso para nuestras ideas. La oficina central casi nunca viene aquí para decirnos que quieren que trabajemos en la cuarta versión del Gear S, sino que más bien buscamos crear el siguiente producto que le interese a la gente”, explica Bornheimer.
Los prototipos se crean en los laboratorios del centro, pero también aprovechan el talento de punta de lanza de Silicon Valley, las startups y tecnología que se gesta ahí.
“Nosotros mismos funcionamos como una startup, pero en lugar de poner nuestro prototipo en Kickstarter, vamos a Corea y se lo presentamos a los ejecutivos de la empresa para que nos financien. Les decimos: ‘¿Nos pueden dar un par de miles de dólares para hacer un prototipo que funcione?’ Luego tenemos que convencerlos de que necesitan instalar una nueva línea de producción que les costará cinco millones de dólares para fabricar una nueva pantalla pero de la que venderemos suficientes dispositivos para que se pague sola”, dijo Greg Holt, director de la Estrategia de Producto de Samsung Design America.
Cómo diseña Samsung
*En California, la compañía cuenta un equipo de desarrolladores con estructura más tradicional en sus oficinas de San José.
*Ellos fueron los encargados de desarrollar el refrigerador inteligente, Family Hub
*En sus oficinas centrales cuentan con un laboratorio que simula una casa en la que pueden probar sus invenciones
Filosofía de trabajo
1. Tomar tiempo para observar con empatía
2. Empieza a construir ahora
3. ¿El equipo tiene dos visiones sobre el producto? Fabrica ambas
4. Aprovecha el talento de otros, pide ayuda si lo necesitas
5. Resuelve el 80 por ciento del trabajo fácil primero
6. Aprende del fracaso, te preparará para el siguiente proyecto