El fraude inmobiliario tiene la desventaja de que sólo el 30% se denuncia, expuso el titular de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), José Antonio Jasso Moreno.
Lo más común en los fraudes inmobiliarios, explicó, es cuando una persona se dice propietario de una casa, sin ser el dueño.
La principal recomendación al vender una casa es que se acerquen a un agente inmobiliario para que realice la transacción.
Para evitar un fraude, la primera alerta con un posible estafador es que piden un enganche relativamente pequeño frente al valor de la casa, cifras de cinco hasta 20 mil pesos.
Regularmente las casas que están en litigio tienen esa situación. “Fraudes hay en todos lados, y en todos los sectores”, dijo Jasso Moreno.
Legalidad
Para contrarrestar esta situación, el año pasado comenzó la acreditación obligatoria para los agentes inmobiliarios.
En el estado hay un estimado de 150 agentes inmobiliarios certificados que operan en León, Celaya, Irapuato y San Miguel de Allende.
Los asesores deben tomar un curso, pagar impuestos, no tener antecedentes penales, aprobar un examen escrito y contar con una carpeta de evidencias en la que se detalla una operación inmobiliaria. Todo esto conjunta la acreditación del Certificado de Competencia Laboral.
Los agentes inmobiliarios deben estar acreditados para realizar una venta, el interesado en vender una casa debe comprobar la posesión de la propiedad con documentos legales, lo que garantiza la legalidad del inmueble.
Todo debe hacerse con documentos, cheques o transferencias, nunca con dinero en efectivo, pues no se pueden recibir más de 600 mil pesos en efectivo.