Tan sólo unas horas después de que el Gobierno federal anunciara el martes un operativo de seguridad para frenar al crimen organizado en Veracruz, la Policía encontró 11 cadáveres abandonados en una camioneta en Boca del Río.

Eran ocho cuerpos de hombres y tres de mujeres, todos semidesnudos, con hematomas recientes, huellas de tortura e impactos de bala.

Los cuerpos tenían huellas de tortura y fueron encontrados con un mensaje que advertía: “Guerra quieren, guerra tendrán”.

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, afirmó antes del hallazgo que tienen identificados a las bandas criminales responsables de la violencia en la zona.

El gobernador del Estado, Miguel Ángel Yunes, ha señalado que el hallazgo no representaba un desafío para su administración debido a que fueron víctimas una guerra entre grupos del crimen organizado.

El vehículo fue dejado a un costado de una escuela, por lo que vecinos del lugar se percataron rápidamente de los hechos y dieron aviso a las autoridades estatales y federales.

Como parte del operativo para frenar la violencia en Veracruz, Osorio Chong ha informado de que serán elementos de la Gendarmería Nacional y del Ejército Mexicano quienes operarán en nueve municipios donde viven casi medio millón de habitantes, aunque no especificó el número de personas estarán involucradas.

‘Tenemos claros los objetivos, quiénes son ellos, e iremos por ellos, por todo lo que representan con sus integrantes’, sentenció Osorio Chong.

Apenas un día antes, una cuadrilla de marinos fue atacada a balazos en la colonia Villa Rica, en un intenso enfrentamiento en el que fueron abatidos dos presuntos sicarios y un elemento de la Secretaria de Marina-Armada de México fue herido de bala.

Al dar el banderazo de salida de los patrullajes de la Gendarmería Nacional con fuerzas policiacas estatales, Yunes Linares calificó como una “barbarie” el hallazgo de los 11 cuerpos ejecutados.

Y admitió que el estado vive ‘tiempos difíciles’ en materia de seguridad peus la tasa de homicidios dolosos ‘ se disparó’ el año pasado.

Yunes Linares justificó que la situación de violencia se debe a enfrentamientos entre grupos del crimen organizado en Veracruz, pero también en 25 entidades federativas.

Ayer el mandatario dio inicio a los operativos de la Gendarmería Nacional que se suma a las labores de seguridad en la zona centro del Estado.

Ahí, Yunes Linares dijo que ya se logró la identificación de dos de las 11 personas ejecutadas.

“Se ha logrado la identificación de dos personas que están en proceso de identificar, no portaban identificación; sin embargo, por características físicas y tatuajes se están identificando, se está analizando si tenían antecedentes penales y en su momento y dentro de las normas se dará a conocer la información”, dijo.

‘Violencia no nos va a doblegar’

Casos como el de Boca del Río, Veracruz no impedirán las tareas en materia de seguridad, afirmó el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

“Esto no va doblegar el esfuerzo federal, el apoyo a los estados, y por supuesto combatir al crimen organizado, combatir a los delincuentes y regresarle la paz a los ciudadanos”, afirmó en conferencia.

Al término de una reunión con la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, el funcionario dijo que casi siempre que las fuerzas federales acuden a un Estado en apoyo a las autoridades locales, hay una respuesta “dura” de la delincuencia.

Admitió que Veracruz, al igual que otros estados de la República, vive circunstancias complejas en la materia, por lo que cuenta con el respaldo del Gobierno federal para hacer frente a la delincuencia.

Y el secretario volvió a defender la disminución de los homicidios dolosos en lo que va del sexenio, a pesar del rebrote de violencia de los últimos meses.

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