A casi un año de implementarse el pago en efectivo en el servicio de Uber, los conductores de este sistema de transporte se han visto afectados por la delincuencia.
“Una vez me pidieron servicio en Héroes de León, era una especie de calle cerrada, pero por construcciones, y cuando vi al chavo parado, que me hizo la seña, vi que no era la persona que me lo había pedido.
“Aparte, alcancé a ver a otro, atrás de un árbol. La verdad, me dio miedo y le saqué, me pasé de largo, y cuando di la vuelta, salieron otros cuatro. Uno se me aventó en el cofre, pidiendo que me parara, pero pensé que si iban a llorar en una casa, no iba a ser en la mía, y le pisé”, platicó David López, conductor de Uber.
Cuando David pudo salir de la colonia, se dio cuenta de que le habían apedreado el automóvil.
Después, en una junta, varios de sus compañeros de Uber denunciaron las desventajas que tiene el pago en efectivo.
“Muchos usuarios no utilizan su nombre, mucho menos sus fotos, crean cuentas solamente para delinquir, asaltan o roban, manchan, destruyen.
“La verdad es que sí nos sentimos inseguros en algunos casos, y no es por elitistas, pero hemos llegado al acuerdo de que si algún usuario no nos late, simplemente no lo subimos”, concluyó Gerardo Liceaga, conductor de Uber.