¿Te despiertas con frecuencia por la noche tras un sueño angustioso? ¿Momentos que has vivido durante el día se convierten de forma recurrente en pesadillas?
Siempre y cuando no afecten negativamente a tu descanso, te felicitamos: según los expertos, las pesadillas podrían estar asociadas a un perfil de persona creativa y más sensible de lo habitual.
Esto atestigua un estudio coordinado por varios científicos del Centro para la Investigación Avanzada en Medicina del Sueño del Hospital del Sagrado Corazón de Montreal (Canadá), en el que se revela que las personas que sufren muchas pesadillas tienen una capacidad y predisposición especial a conectar con lo emocional.
Los expertos ignoran el origen exacto de estos sueños inquietantes, aunque sí tienen dos certezas: la primera, que en un alto porcentaje tienen que ver con algo que hemos vivido a lo largo del día y que, de alguna manera, nos ha impactado; y la segunda, que aparecen siempre en la fase REM del sueño (la franja de sueño profundo). Este último es, precisamente, el elemento clave a la hora de entender la relación entre las pesadillas y las mentes creativas.
“Según las investigaciones, las personas que tienen un pensamiento creativo, los artistas, por ejemplo, tienen un mayor porcentaje de sueño REM, y por una cuestión de estadística, como tienen un mayor porcentaje de sueño REM tienen mayores probabilidades de sufrir pesadillas”, asegura el doctor Gonzalo Pin Arboledas, especialista en Trastornos del Sueño.
Así duermen los genios ‘locos’
Otros informes pioneros, como el que elaboró el doctor Ernest Hartmann en 1987, comprobaron que la mente de los pacientes con pesadillas habituales poseía intereses y talentos artísticos.
Sin embargo, la psicóloga Ana Millán, especialista en personalidad y trastornos del estado del ánimo, da una explicación liberadora: “No es que haya una relación directamente proporcional entre creatividad y locura, pero sí, por una parte, en los estados psicóticos se produce un proceso parecido al del sueño en cuanto a la materialización cognitiva de las ideas, ya que en ellos tampoco existe la restricción de lo social porque se pierde el contacto con la realidad”.