Disminuyó considerablemente el flujo de migrantes que generalmente a su paso por Salamanca, llegaban por apoyo a la casa del migrante “San Carlos Borromeo”
Lo anterior fue expuesto por el encargado del albergue, Miguel Ángel Ramírez, al precisar que en promedio cada mes se registraba la visita de 100 a 120 migrantes, cifras que se mantuvieron al margen en los meses de enero y febrero.
No obstante, para marzo la cifra bajó considerablemente, pues tan solo se contó con el arribo de 40 personas y actualmente no hay migrantes, ni siquiera por concluir el fin de semana, que era cuando generalmente se atendía a mayor número de gente.
Atribuyó una de las causas a los operativos del tren que se han extendido en el municipio, razón por la cual los migrantes tratan de evitar su paso por Salamanca y buscar otras rutas.
Lo cierto, mencionó, es que también el 30 por ciento de las personas que llegaron en febrero regresaban de la frontera, pues se les dificultó su acceso a Estados Unidos.
“La mayoría iban a Estados Unidos, vienen de regreso, dicen que esta difícil y no pueden pasar, que hay mucha gente en la frontera esperando y se pone más difícil, sobre todo los que van por primera vez, se desaniman, ni se esperan a buscar la manera, algunos que intentan o los deportan vuelven a intentar, dicen que se pone cada vez más difícil” explicó.
Dijo que la gran mayoría son migrantes centroamericanos, mientras que un porcentaje es gente que proviene de estados como Chiapas y Oaxaca.
Detalló que otra minoría corresponde a mexicanos que llegaron a Salamanca con la promesa de un trabajo en la refinería, lo que no sucedió.
La casa del migrante ofrece hospedaje, alimentación, un kit de higiene con ropa interior, pasta y cepillo dental, rastrillo, jabón, un cambio de ropa y de ser posible un par de zapatos.
Asimismo se les proporciona a los migrantes atención médica en el ISSSTE y el Hospital General y de tratarse de casos más complicados de salud se proporciona apoyo con Cruz Roja, institución que además les facilita una llamada para que se comuniquen con su familia.
Añadió que se les pide a los migrantes registrarse con nombre y fotografía, lo que a veces llega asustarlos, sin embargo el propósito es llevar un seguimiento que facilite su localización, en caso de ser buscados por su familia.