Bravos no pudo contar con mejor escenario, y es que en el año de su resurgimiento como franquicia, el Arco de la Calzada de León fue el lugar perfecto para observar y sobre todo enmarcar, el inicio de su andar por la Liga Mexicana de Beisbol.
El tráfico se detuvo en las inmediaciones de la Calzada, y aunque el sol no hizo lo propio, esto poco importó a la novena guanajuatense y a la afición al “rey de los deportes” que ayer al mediodía, estuvieron presentes tanto en la toma de la fotografía oficial del equipo, como en la misa previa.
Algunos prefirieron la sombra aunque estuvieran alejados de los peloteros, otros en el rayo del sol presumían conocer a todos los integrantes del roster que con Walter Silva a la cabeza, debutarán hoy en la Liga ante Pericos de Puebla.
Se ‘cargan’ con la afición
Sin duda, la presencia del roster completo de Bravos generó mucho interés en el centro de la ciudad, tanto, que incluso un conductor de transporte público detuvo su unidad por algunos segundos para tomar una fotografía desde la ventana.
Previo a este evento, el equipo, junto con el mánager Francisco “Paquín” Estrada y su grupo de entrenadores, además de la dirigencia y el socio del equipo Arturo Blanco, asistieron a la tradicional misa por el inicio de la temporada en el Templo Expiatorio.
A las 10 de la mañana, el sacerdote Alejandro Hernández fue el encargado de oficiar la ceremonia eucarística en la que los integrantes de Bravos también participaron, y es que incluso Eduardo Arredondo dirigió unas palabras a sus compañeros.
Al término de ésta, más o menos al mediodía, la fotografía del equipo que jugará la temporada 2017 quedó registrada con el Arco de la Calzada como fondo principal, un símbolo que de acuerdo al presidente del equipo Mauricio Martínez, será básico para que los peloteros se identifiquen con la ciudad.
Después de este par de eventos, la novena guanajuatense viajó a Puebla, donde hoy a las 7 de la noche, jugarán el primer partido de la serie que significará el regreso de Bravos.
Su primer rival serán nada más y nada menos que los campeones, Pericos de Puebla.
Abren ante el más difícil
Bravos de León regresa después de 25 años a la Liga Mexicana de Beisbol, con un partido inaugural frente al campeón de la temporada 2016, Pericos de Puebla.
La novena leonesa llega encaminada por el mánager Francisco “Paquín” Estrada, quien fue el líder Bravo que logró el campeonato en 1990; un año después, el equipo desapareció.
Ahora, con la reestructura que sufre a cargo de Mauricio Martínez, el primer juego dará para sentar las bases de un roster novato que tendrá como rivales a todos los equipos grandes de la Zona Sur, entre ellos los Diablos Rojos del México, ultimo equipo con el que se enfrentaron antes de desaparecer.
En la pretemporada, el equipo estuvo en actividad por 18 días en Ciudad Obregón, Sonora.
Tuvieron seis enfrentamientos amistosos pactados con Rieleros de Aguascalientes, donde la novela alcanzó dos victorias y cuatro derotas.
El partido inaugural se jugará en Puebla ante los Pericos, donde el actual campeón buscará hacer del bateo su principal arma ante el Lanzador Walter Silva, quien será abridor en el diamante Hermanos Serdán de la ciudad Camotera.