Familiares y amigos le dieron el último adiós al pequeño Ángel.
El cuerpo del pequeño fue sepultado ayer en el panteón nuevo de San Francisco del Rincón.
El pequeño de 9 años falleció el jueves luego de estar luchando por su vida 15 días en el Centro Nacional de Investigación y Atención a Quemados de la Ciudad de México.
Ángel murió a consecuencia de las quemaduras que sufrió durante un incendio el 5 de abril en la colonia Los Mirasoles, en Purísima del Rincón.
Registró quemaduras en el 80 por ciento de cuerpo, y pesar de la lucha de los doctores por salvarle la vida, finalmente falleció.
Un sacerdote dominco, traído de la ciudad de León, fue el encargado de celebrar la emotiva misa para despedir a Ángel.
La celebración eclesiástica se alargó hora y media, en la cual al finalizar, el sacerdote llamó a todos los pequeños a que se acercaran a la tumba del pequeño que falleció para que se despidieran de él.
Luego, al salir Ángel en hombros de sus familiares sonó el mariachi, que con sus canciones hizo más emotivo el momento.
Cerca de las 11:30 de la mañana el cortejo fúnebre partió rumbo al panteón de la colonia San Miguel.
El camino fue largo para los familiares, quienes destrozados y con la cabeza baja acompañaron la carroza que llevaba al pequeño Angelito.
La mayoría de las personas iban vestidos de blanco, en homenaje al ángel que ahora está en el cielo.
Habitantes de San Francisco, al escuchar los llantos de las personas que iban en el cortejo fúnebre salían a la calle y se contagiaban de tristeza al observar la carroza con el pequeño ataúd de Ángel.
Finalmente, llegaron al cementerio donde Ángel fue recibido por decenas de globos blancos.
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