El amor de una madre no solo apapacha y consiente, también alimenta y nutre. Las mamás suelen encargarse día a día de preparar los alimentos para toda la familia, desde el desayuno para comenzar con energía el día, el lunch y snacks para la escuela y el trabajo, o las deliciosas comidas caseras.
Si nos pusiéramos a hacer un recuento de todo lo que ellas hacen por nosotros, nos daríamos cuenta que no tenemos lo suficiente para pagarles y agradecerles toda su atención y su amor; después de todo, madre solo hay una.
Merecida celebración
Si bien, a diario hay que dar las gracias, existe un día designado especialmente para celebrar a mamá. Festeja a su lado con un brunch muy especial, ya sea que lo prepares tú mismo o que la consientas en alguno de los múltiples restaurantes que ofrecen esta opción.
Pero, a todo esto ¿qué es un brunch? el Pequeño Larousse de la Gastronomía lo describe como una comida de origen estadounidense que funge a la vez el papel de desayuno y de almuerzo. Se trata de un portmanteau (composición lingüística en inglés) entre las palabras breakfast y lunch que, al unirlas, se obtiene la palabra brunch.
En la cultura restaurantera el desayuno y el almuerzo son muy solicitados entre semana; no obstante, el brunch es un asunto de fines de semana, entre las 10 y el medio día, del domingo.
Su origen no es exactamente conocido aunque existen diversas teorías sobre cuándo comenzó la tradición y cuándo se forjó la palabra. Una de ellas afirma que el origen del brunch se deriva de la práctica católica de almorzar después de la misa, la cual concluía antes del mediodía.
La primera ocasión en que se documentó la palabra escrita fue durante un ensayo “Brunch: A Plea”, publicado por el autor británico Guy Beringer en una edición de Hunters Weekly. En él, Beringer se dedica a describir algunas cualidades del brunch, tales como su desenfado, su naturaleza alegre y social. Típicamente el brunch consiste en diversos platillos comunes del desayuno, como lo son la fruta, el pan, el café, huevos preparados y jugos, acompañados, claro está, de elementos pertenecientes a una comida más pesada que puede incluir diversos cortes de carne, pescados, ensaladas, pastas, postres y, por supuesto, de bebidas como la champaña, el vino espumoso o el prosecco, cuyo consumo sería inaceptable durante el desayuno.
Cualquiera que sea el origen del brunch, lo cierto es que llegó para quedarse. En la Ciudad de México existen diversas opciones que ofrecen a los comensales este “híbrido”. Principalmente se trata de restaurantes de hoteles que incluyen una enorme variedad de opciones de comida, barras de postres e incluso champaña ilimitada.
En la ciudad, algunos restaurantes que ofrecen el brunch son Aromas Restaurante, La Vaka León, Ma Come No, Almuerzos del Moral, Los Azulejos, Las Moras, entre otros.
Los elementos principales
Típicamente el brunch consiste en diversos platillos comunes del desayuno:
*Fruta
*Pan
*Café
*Huevos preparados
*Jugos
*Diversos cortes de carne, pescados, ensaladas, pastas, postres
*Champaña, el vino espumoso o el prosecco