En la capital de Argentina, Buenos Aires, con órdenes de un juez, entraron a las oficinas de la compañía brasileña.
Esto fue confirmado por la compañía, que envió un comunicado y afirmó que hace más de dos semanas, el 9 de mayo, se ofrecieron a colaborar en la investigación.
“La empresa reafirma su posición en colaborar con la justicia y espera reconquistar la confianza de la sociedad con una actuación empresarial íntegra, ética y transparente”, escribieron.
La orden fue emitida por el juez Sebastian Casanello y el fiscal que está investigando es Federico Delgado. Indagan en presuntas irregularidades en la obtención de un contrato de 2 mil 700 mdd para Aysa, compañía de agua. Delgado ofreció a Odebrecht dar datos bajo la figura de arrepentido. La propuesta tiene una vigencia de cinco días.
Los directivos de Odebrecht confesaron que durante 2010 y 2014, aceptaron haber pagado 35 mdd para ser favorecidos con contrato de obra pública.
Sobornos en Latinoamérica
Odebrecht reconoció como parte de un acuerdo con el Departamento de Justicia estadounidense el pago de más de 700 millones de dólares a gobiernos de América Latina a fin de conseguir contratos millonarios de obras públicas. En el caso de Argentina, sus ejecutivos admitieron que pagaron 35 millones de dólares entre 2007 y 2014, cuando gobernaba Fernández (2007-2015).