Es probable que los dirigentes de Morena estén curados de espanto, pero eso nos los exime de que las autoridades correspondientes hagan su trabajo y los investiguen por delitos que rayan en la corrupción, además de que aparentemente han hecho del lavado de dinero, la extorsión y venta de cargos políticos su mejor negocio.
Ayer, en un video de la serie que aparentemente le fue grabada a quien ahora se conoce como la recaudadora, Eva Cadena, y excandidata por Morena al municipio de Las Choapas, Veracruz, se involucra a la coordinadora de Morena en la Cámara de Diputados, Rocío Nahle García, y en él se le oye decir a Cadena que es esta última la verdadera operadora financiera de AMLO. La “que le acerca los dineros”, afirma la actual diputada local de Veracruz.
Por supuesto que en su defensa, la implicada, Rocío Nahle, ya salió a dar la cara y, sin aparente espanto sobre lo dado a conocer por el diario El Universal, declaró “No soy operadora financiera de nadie”.
Aun con todas las agravantes en su contra, es difícil que Nahle García se declare culpable y todo indica que el asunto quedará en un video más, porque en esa ruta de ilícitos la lección la tienen bien aprendida, “lo que diga mi abogado”.
Bueno, hasta la fecha, ni al mismo señor de las ligas, René Bejarano, exsecretario particular de AMLO, le hemos escuchado una declaración que aclare el uso de los dineros recibidos y bien acomodados en un portafolio, donde todos fuimos testigos de la forma tan grotesca con la que los fajos sobrantes fueron amarrados con ligas y puestos en las bolsas de su saco.
Bejarano, Imaz, Ponce y Cadena, son algunos apellidos que en su momento han dado cuenta de grandes cantidades que se manejan alrededor del jefe de grupo, y en todos los casos las sospechas siguen siendo las mismas: dinero ilícito, lavado de dinero, extorsiones, diezmos o aportaciones “voluntariamente a fuerzas” de algunos empleados donde ellos gobiernan, desvió de recursos públicos…
En las argumentaciones para tratar de desvanecer el impacto mediático y político, a los de Morena los volveremos a escuchar decir que se trata de un golpe político al presidenciable AMLO, que una vez más están frente a una acción de la mafia en el poder, y, por supuesto, de los dineros que aparentemente se reciben de manera ilícita ni una palabra habrá, no, aunque la constante nos diga que los delitos acompañan su causa y también la complicidad.
El video mostrado está editado, eso ni duda cabe, pero lo cierto es que hay declaraciones que técnicamente nos dicen que son conversaciones completas y, si acaso, es otra parte hasta ahora no vista, lo cual también habla de que es un video que se está dosificando en sus entregas y en esa hipótesis más vale que en verdad los implicados estén curados de espanto, porque está visto que en eso de hacer política todo se vale.
En fin, al ver este tipo de anomalías y prácticas deshonestas de parte de quienes en su momento se han acercado a la ciudadanía a pedir un voto de confianza, lo único que nos queda es pedir precisamente a los legisladores que ya se pongan de acuerdo para designar al fiscal anticorrupción y, de esa manera, el nuevo Sistema Nacional Anticorrupción entre totalmente en vigor con toda su fuerza. ¿O es por ese tipo de videos que no hay acuerdos en el tema?