Aunque cuando el Ayuntamiento aprobó la venta de terrenos, el alcalde Ramón Lemus aseguró que no contaban aún con compradores, el proceso debe de iniciar con una solicitud de compra precisamente de éstos.

A finales de junio pasado, cuando por mayoría panista el Ayuntamiento aprobó la venta de dos terrenos, Lemus Muñoz Ledo afirmó que los mismo no estaban etiquetados para ningún comprador.

Ello, pese a que la Comisión de Hacienda había aprobado ya en el dictamen uno para la empresa Coprice, en Crespo, y uno para el particular, José Alberto Montoya Torres, en el ejido Rincón de Tamayo.

“No tienen comprador, el Ayuntamiento no va a etiquetar a ningún comprador determinado”, señaló aquella ocasión el Alcalde.

Pero ello contrasta con el proceso de solicitud de compra, pues son los interesados en adquirir los terrenos quienes la realizan.

La Tesorería municipal es quien recibe la solicitud, misma que se canaliza a otras dependencias para el análisis de su posible venta, explicó la tesorera Lourdes Herrera.

“La Tesorería, en la Ley Orgánica Municipal, es la encargada del patrimonio municipal. A mí me llega la solicitud y yo la canalizo al área de Control Patrimonial, que tiene que revisar con IMIPE si es factible o no tienen algún proyecto para el inmueble.

“Tienen que revisar con Catastro, hacer un avalúo, con (la Dirección de) Desarrollo Urbano, con diferentes dependencias, cuando hace una evaluación general nosotros damos un dictamen y decimos si es factible o no la venta y en qué precio”.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *