El ex alcalde de Silao, Enrique Benjamín Solís Arzola, salió en libertad bajo fianza tras ser condenado a 2 años de prisión por los delitos de lesiones calificadas y amenazas en agravio de la reportera Karla Janeth Silva Guerrero y la secretaria Adriana Palacios.

Además no podra ocupar un cargo público en un periodo de dos años. 
Al lapso se le descontó el tiempo que duró en prisión preventiva, impuesta como medida cautelar el 11 de marzo de 2016, un año, 4 meses y 10 días menos.
Así lo determinó la juez, María Eugenia Chávez Orduña, durante una audiencia de procedimiento abreviado que solicitó el ex funcionario para terminar con el caso.
La solicitud fue aprobada una vez que la Fiscalía expuso los datos de prueba y propuso la condena contra Solís Arzola, quien renunció a su derecho de llevar a cabo un Juicio Oral, en el que podría debatir con la parte acusatoria.
Otro de los acuerdos fue que Solís hiciera la reparación del daño como lo establece la ley, por medio de montos de dinero a las dos afectadas, quienes no revelaron la cantidad.
El ex Alcalde también tuvo que pedir una disculpa de frente a ambas víctimas, durante la audiencia.
En la misma, dio por entendido que él había sido quien obligó a Nicasio Aguirre Guerrero, ex director policíaco, a dar instrucciones al ex director operativo Alejandro Fonseca para que contratara a “personas mañosas” para “callar” a Karla Silva por sus notas periodísticas.
La disculpa tendrá que repetirse en una publicación impresa en un medio de circulación estatal.
Se comprobó así que José Samuel Ornelas (alias El Buda), Luis Gerardo Hernández Valdenegro (El Mapas) y Joaquín Osvaldo Garnica (El Bayo), fueron quienes acudieron a las oficinas de la periodista, para golpearlas a ella y a su compañera mientras lanzaban la amenaza de “bájale de huevos a tus pinches notas”.
La agresión ocurrió el 4 de septiembre de 2014, en las oficinas del diario El Heraldo en Silao.
La parte acusatoria, en la que también estaba involucrada la empresa periodística para la que laboraban ambas, desistió del delito de robo calificado en contra de Solís.
Con base a lo anterior, la juez determinó que el inculpado era acreedor a la condena en prisión propuesta, el pago de una multa de 55 días de salario mínimo de acuerdo al año 2014, que en total asciende a 3 mil 507 pesos y 37 centavos.
Pero por haber tenido buena conducta y por los beneficios que da el juicio abreviado, podría optar por purgar el tiempo restante tras las rejas, realizar trabajo comunitario o pagar un día de salario mínimo a cambio de cada día de prisión.
Finalmente, la defensa del ex Alcalde decidió pagar la multa de 14 mil 858.41 pesos a cambio de los 233 días restantes, así como la multa para quedar en libertad siempre y cuando los oficiales entregaran el recibo en Irapuato, donde estaba recluido el ex funcionario.
Con estos hechos, siendo las 8:35 de la noche, concluyeron los casi 3 años del caso que conmocionó a la sociedad de Silao y al gremio periodístico.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *