Los ladrones han buscado alternativas para cometer atracos y los locatarios de la Zona Piel han registrado en video robos en los que participan niños.
En videos que circulan por redes sociales se aprecia a una niña de aproximadamente seis años tomar la bolsa de la empleada de una tienda de zapatos; la misma acción la repite en un local de corsetería y una dulcería.
En la grabación se ve a la niña vestida con suéter blanco con mangas rosas, con un perrito negro en el pecho, y un pantalón de mezclilla y tenis.
La pequeña va acompañada de una mujer obesa, de tez morena y cabello corto, peinado con un tipo chongo, que viste camisa blanca con un estampado negro, mallas rosas y lleva una bolsa negra de un tirante. Con ellas también aparece una adolescente con sudadera negra.
En la zapatería, mientras la señora simula ver la mercancía, con una mano le da una señal a la pequeña con varios toques en la espalda, enseguida la menor se mete detrás del mostrador.
La adolescente llama a la mujer, detrás le sigue la vendedora, momento en que la menor toma la bolsa. La vendedora se regresa al mostrador y la niña sale corriendo del local, pasando por un costado de la víctima.
Por lo que se observa en el video, al menos otras dos mujeres también son cómplices en este robo.
El atraco se cometió en la Plaza CTM, ubicada en el bulevar La Luz y calle Plan de San Luis, el martes 18 de julio pasado, a la 1:20 de la tarde.
Roba corsetería y dulcería
Cuatro días antes, Janet Valdivia, quien atiende un local de corsetería, ubicado en la calle Plan de San Luis, también fue víctima de las mujeres y la niña; le robaron su bolsa con la misma táctica.
El atraco volvió a quedar registrado en video. En la grabación se puede ver que la menor trae la misma vestimenta y peinado.
En esa ocasión, la mujer que acompaña a la niña solicita tallas especiales de ropa interior para su hija (la adolescente) con la finalidad de hacer que la comerciante baje varias tallas para complacer a quienes simulaban ser sus clientas.
“Me dijo que quería tallas especiales, porque su hija estaba embarazada. En lo que las atendía también llegó gente, pero desde que entraron yo presentía algo, uno se da cuenta cuando la gente va a comprar y ellas trataban de distraerme”, recordó la vendedora.
Cuando los clientes y las ladronas se fueron Janet se percató que su bolsa no estaba. Al revisar los videos descubrió que la niña cometió el robo mientras ella atendía el negocio.
El mismo tipo de robo se cometió en una dulcería. La señora y la adolescente distrajeron a los vendedores, para que la niña pudiera colarse detrás del mostrador para buscar la bolsa de alguna empleada y salir corriendo.
La niña, acompañada de las mismas mujeres, juega con una silla en un local de corsetería de Zona Piel.
Momento en que la pequeña toma la bolsa de la empleada de la tienda, mientras las mujeres la distraían.
La menor huye del negocio con la bolsa, sin ser sorprendida.
Atrapan a ladrona
El mismo sábado que robaron a Janet en la corsetería, en uno de los locales ubicados sobre el bulevar Hilario Medina, una mujer fue sorprendida en otro negocio cuando tomaba la mochila de un cliente que estaba comprando mercancía.
Los locatarios la detuvieron, la entregaron a la Policía y solicitaron que se hicieran cargo de ella o de lo contrario ellos harían justicia con su propia mano.
Hurtan en familia
Los comerciantes de la Plaza Mercado Piel también ha sido víctimas de personas que roban en familias o en grupo.
Hace unos meses, a Brenda Martínez la distrajo una familia para robarle su celular en uno de los locales que atiende.
“Llegaron una señora y tres muchachas, yo estaba sentada detrás del mostrador, jugando con mi teléfono y lo dejé debajo del mostrador para atenderlas. Me comenzaron a pedir zapato y tuve que ir a otro local por el modelo e incluso crucé la silla a la entrada al mostrador. No compraron nada y se fueron, pasaron uno minutos y entre por mi teléfono y ya no estaba”, recordó Brenda.
No sólo ella como locataria ha sido víctima; a su mamá dos mujeres le sacaron el celular de la bolsa.
Brenda Martínez (de amarillo) y su hermano Humberto (gris), comerciantes de Plaza Mercado Piel, han sido víctimas de robo. Foto: Luz Elena Escobar Bolaños
“Mi mamá tenía en la bolsa del pantalón su celular, y llevaba en sus dos manos varias bolsas de mujer al otro local, cuando pasó por un pasillo de la plaza, entre la gente se le pegaron las dos mujeres al cuerpo, a ella se le hizo raro. Sí está lleno de gente, pero no tanto para hacer eso. Al salir de la plaza, ya no sintió su celular”.
La madre de Brenda entregó las bolsas y fue a buscar a las mujeres, pero no las encontró.
Capturan a ladrones
Humberto Martínez, hermano de Brenda, ha frustrado varios robos los locales familiares que atiende, dijo que por su experiencia ha logrado detectar a los ladrones.
“Comúnmente son mujeres las que roban en la Central o chavitos. Siempre entran en grupo, comienzan a pedirte zapatos de puntos que no tienes a la vista o colores y modelos diferentes, y se riegan entre el local para no saber a quién atender y te distraigas”.
En una ocasión, mientras Humberto atendía a varios clientes, observó a una señora meter tres carteras en una casaca. Cuando la mujer se iba Humberto la detuvo y la obligó a devolverlas. Ella negaba haberlas tomado, pero la presión del vendedor la obligó a sacarlas frente a la gente.
La semana pasada, Brenda y Humberto vieron a varios locatarios seguir y detener a un hombre que llevaba una bolsa negra con bolsas para mujer, iba acompañado de otros hombres que huyeron. Fue retenido por los guardias de la plaza y entregado a la Policía.
Jazmín Reyes, locataria de Plaza Mercado Piel, recuperó una bolsa que la había sido robada por un joven.
Roban en segundos
Cualquier mercancía de fácil acceso es el objetivo de los ladrones.
Así ocurrió en una bodega de blancos que exhibe almohadas y cojines afuera del local, sobre la calle Polar, en la Zona Piel.
Jorge Almeida, locatario de la Central de Autobuses, presenció cuando un grupo jóvenes pasó varias veces por la calle, simulando buscar un local, y en un momento que la bodega de blancos estaba llena de clientes, aprovecharon para tomar varias almohadas y cojines.
“Fue en segundos y no reaccioné, me quedé viendo la escena, salieron corriendo para el Hilario Medina y uno de los trabajadores de la bodega se fue atrás de ellos, pero sólo logró quitarle el cojín a uno, eran como seis”, recordó el comerciante.
Recupera bolsa
Jazmín Reyes es otra locataria de Plaza Mercado Piel, que ha sido víctima de los robos.
El mes pasado vendió una bolsa a una cliente, subió a la bodega por otra bolsa para llenar el espacio de la que había vendido y en segundos se la robaron.
“Puse la bolsa en el stand y en lo que caminé para el mostrador y me senté, quedando de frente a las bolsas, ya no estaba la que acababa de poner, fue cuestión de segundos y me saqué de onda porque no supe qué pasó y no tenemos cámaras para revisar”, platicó.
Más tarde, el guardia se seguridad le regresó la bolsa a Jazmín, se la había quitado a un joven que corría por el pasillo.
El guardia le dijo que le había parecido sospechoso el joven, por lo que lo siguió hasta la calle donde lo esperaban otros muchachos, pero al verlo detrás del ladrón, éstos corrieron y el guardia logró quitarle la bolsa; sin embargo, el agresor corrió sin que pudiera ser entregado a las autoridades.
Locatarios coinciden en que han detectado a dos o tres mujeres, al parecer con niños, que tratan de distraer a los vendedores para aprovechar una oportunidad y tomar mercancía.
Algunos comerciantes por su experiencia se dan cuenta cuando alguien tiene intenciones de robarlos y hacen presión preguntando si van a comprar el producto o por el color o modelo que buscan. Otros se limitan a decir que no tiene el producto para evitar moverse y descuidar la tienda, pues, aunque tengan cámaras, eso no les garantizan la seguridad de la mercancía.