Anuncios que prohíben realizar actividades de comercio o pedir ayuda económica dentro del Sistema Integrado de Transporte (SIT) son ignorados sistemática cotidianamente.
Los taquilleros continúan dejando parar a quienes realizan estas prácticas, a pesar de que en algunos paraderos incluso se pueden ver renovados los anuncios de prohibición, que no son de ninguna utilidad.
En terminales del SIT como Delta, se puede seguir viendo personas haciendo comercio, ocultando su mercancía con bolsas negras cuando ven algún vigilante, a pesar de que fue prohibida esta práctica a principios de año por las direcciones de Movilidad y Comercio del Municipio. Entonces se prometió a estos comerciantes reubicarlos para que no se viera afectada su economía.
Pasados seis meses, los vendedores han optado por vender a escondidas en las unidades del SIT, subiendo a diario.
Además de los comerciantes, músicos y hasta payasos suben cada día a los autobuses para pedir ayuda económica a los usuarios. La prohibición no importa.