Tras la incursión de cartel jaliciense en el estado de Michoacán han comenzado ha encenderse la alertas, sobre todo en diversas corporaciones de los tres niveles de gobierno en la entidad; el asedio que sufren las corporaciones es notorio, sobre todo aquellas que son de Seguridad Pública.
El incremento en la violencia, según comentan las fuentes oficiales, se debe en gran medida al choque de bandas rivales: mientras los locales intentan detener la incursión, los nuevos llegados desean tener el control de la plaza a como dé lugar y, con ello, hacerse del negocio del narcotráfico.
Los crímenes se han vuelto constantes en sitios que hacen frontera con los estados de Jalisco y Guanajuato; así pues la ejecución volvió a ser una práctica común desde Los Reyes hasta La Piedad.
Los crímenes están marcados por una severa crueldad.
El cartel jaliciense tiene presencia en Tierra Caliente michoacana donde, que de acuerdo con informes policiales se enfrenta con los comandos de Nicolás Sierra Santana, ‘El Gordo’, quien no da tregua a quienes atribuye la muerte de José Carlos, su hermano menor, asesinado en una emboscada a principios de marzo pasado.
Autoridades
Juan Bernardo Corona Martínez, secretario estatal de Seguridad Pública, señaló que riesgo latente porque “el crimen organizado pretende apropiarse de algunas regiones en Michoacán, pero no lo vamos a permitir”.