En la relación comercial con Canadá, México debe apuntar hacia sectores dinámicos no explorados, como nuevos materiales, digitalización, fintech (tecnología para las finanzas) y manufactura avanzada, dijo Rodrigo Contreras, consejero de ProMéxico en esa nación.
Canadá es el cuarto socio comercial más relevante para el País y ya hay una gran industria minera, automotriz y farmacéutica, pero aún hay posibilidades de abrir negocios en otros sectores que no han sido explorados o son de reciente creación.
Además, esto daría la oportunidad de fortalecer una relación en la que parece que el vínculo común, Estados Unidos, es más fuerte que la relación directa.
“La relación con Canadá es muy vieja y profunda, pero aun hay muchos espacios por explorar y a partir de ahí se pueden hacer muchos negocios conjuntos”, explicó en entrevista con REFORMA.
Un ejemplo específico de donde se puede trabajar es en la industria automotriz, que cada vez más se dirige hacia vehículos autónomos y con mayor interconexión.
El País, que ya superó a Canadá como productor en volumen, aun tiene que mejorar sus capacidades tecnológicas y de innovación, y ahí es donde el vecino del norte ofrece la oportunidad de ampliar la cooperación.
Otro ámbito donde se considera hay grandes posibilidades es tecnología para las finanzas, en donde a través de mecanismos tecnológicos se puede trasladar capital, comprar servicios o hacer transacciones bancarias.
En la industria agroalimentaria, aunque aquí ya hay vínculos, existe la posibilidad que los productores mexicanos puedan utilizar a Canadá como plataforma logística hacia mercados en Asia, como Corea del Sur o China.