Después de comer nuestro cuerpo comienza su proceso de digestión, para lo cual ocupa gran parte de nuestra energía y en muchas ocasiones puede producir sueño, o lo que en México se le conoce como el famoso “mal del puerco”.
Si bien, lo que se recomienda es mantenerse sentado en la sobremesa para el proceso digestivo, investigadores descubrieron los beneficios de tomar una caminata después de comer.
Beneficios
-Reduce niveles de azúcar. La más reciente de las investigaciones, llevada a cabo por expertos de la Universidad George Washington, ha revelado que esta caminata puede reducir los niveles de azúcar en sangre, que aumentan entre los 30 y 60 minutos después de la comida. Para que sea efectivo, según el estudio, el paseo debe ser de 15 minutos, a paso ligero.
-Pierdes esos kilitos ‘de más’. Además de reducir la glucosa en sangre, la caminata a esta velocidad podría ayudarnos a perder peso. Hasta 1,5 kilos en total, aunque tendremos que andar durante media hora, concluye otro estudio, realizado en la Clínica Yasuyo Hijikata de Osaka.
-Acelera la digestión. Investigadores alemanes encontraron que caminar tras ingerir los alimentos el proceso de digestión pasa de durar 123 minutos sin caminata a 107 minutos con ella, es decir, la acelera.
-Alivia el reflujo y la acidez. según concluyó un trabajo que analizó el pH del esófago después de dar un desayuno de huevos con beicon y café a los participantes, y pedirles que pasearan durante una hora al terminar de comer.
¿Aún con sueño?
Si después de dar un paseo de al menos 15 minutos, y si aún así vuelves a casa con ganas de dormir, también puedes sacarle partido a la siesta. Eso sí, no debes pasarte de los 30 minutos si quieres aprovechar de sus beneficios.
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