Muerte por sobredosis, condiciones insalubres y contagio de VIH por compartir jeringas son algunos de los mayores riesgos que corren los consumidores de drogas en los “picaderos” o casas donde se reúnen para drogarse.

Pensando en esto, una asociación civil de Baja California creó un proyecto piloto donde podrían proteger a los consumidores de drogas de estos riesgos.

Sin embargo, el lugar fue clausurado por las autoridades del Ayuntamiento de Mexicali, argumentando que el local no tenía licencia de construcción y uso de suelo; los dueños tiene 3 días para regularizar su documentación.

El proyecto

La asociación civil Veter, que ayuda a personas adictas a las drogas, creó este proyecto único en México y toda América Latina. Con unos cubículos parecidos a los de un cibercafé, jeringas nuevas, servicios médicos y material de curación e higiene, la intención era proveer un espacio donde personas con problemas de adicción pudieran consumir de forma segura.

El centro se encontraba como prueba piloto. Tiene una capacidad para 30 personas y por el momento sólo recibía a mujeres.

Quienes quisieran entrar, debían escuchar una plática sobre seguridad, llevar solo una dosis para consumo personal y no se permitía la venta de drogas dentro del lugar.

Actualmente el lugar solo recibía mujeres. Foto: Especial

Un riesgo real

Baja California se encuentra entre los 3 estados con mayor consumo de drogas en el país, junto con Jalisco y Quintana Roo.

El centro fue abierto con la intención de ofrecer un espacio seguro y alejar a los consumidores, que normalmente se reúnen en casas abandonadas, de riesgos.

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