La Administración Nacional de Seguridad Nuclear de Estados Unidos (NNSA, por sus siglas en inglés) ha comunicado sobre el inicio de la construcción de la primera ojiva nuclear de bajo rendimiento para los misiles balísticos estadounidenses Trident.
En un correo electrónico remitido a la plataforma Exchange Monitor, la NNSA indicó que ya comenzó el ensamblaje de la ojiva W76-2, y que espera entregar a la Marina las primeras unidades de esos dispositivos con capacidades operacionales a finales del año fiscal 2019.
La ojiva W76-2, destinada para equipar a los misiles Trident de los submarinos estadounidenses, es una versión modificada y menos potente del W76-1. La NNSA además indicó que la fabricación de esta arma está estipulada en la Revisión de la Postura Nuclear ordenada por el presidente Donald Trump. La Administración Trump argumenta que el desarrollo de un arma de bajo rendimiento haría que una guerra nuclear sea menos probable, al darle a Estados Unidos un elemento disuasivo más flexible.
Sin embargo, los demócratas del Congreso estadounidense se oponen enérgicamente a la producción de W76-2, debido a que precipitaría una carrera armamentística y aumentaría las posibilidades de que un conflicto convencional se convierta en una guerra nuclear. En ese sentido, el presidente del Comité de Servicios Armados de la Cámara Baja, Adam Smith, había manifestado que introduciría mecanismos legislativos que prohíban esa arma. Por su parte, Stephen Young, de la organización Unión de Científicos Preocupados, considera que lo más probable es que los encargados del desarrollo del W76-2 hayan reducido su rendimiento quitando una de las dos etapas del dispositivo termonuclear original.
“El único requisito es reemplazar la segunda etapa con una versión ficticia, que es lo que se hace cada vez que realizan una prueba en un misil”, dijo Young, agregando que la cantidad de tritio, un isótopo de hidrógeno, también puede ser ajustada.
El resultado sería reducir su poder explosivo de 100 kilotones de TNT a aproximadamente cinco, casi un tercio de la potencia de la bomba lanzada sobre Hiroshima.
Con información de RT.
Sigue leyendo:
El Helicoide en Venezuela: de centro comercial a sitio de torturas