Un nuevo episodio de la Estafa Maestra sale a la luz.
Enrique González Tiburcio, exsubsecretario de la Sedatu, es quien supuestamente firmó el convenio con la Universidad Francisco I. Madero que resultó en el presunto desvío por 185 millones de pesos, en 2016.
Este exfuncionario asegura que la firma que aparece en el acuerdo no es suya, sino que fue falsificada.
El contrato iniciaba la relación de la secretaría con la universidad para realizar diversos servicios.
Denuncia por falsificación
Ante esta afirmación, el exsubsecretario de Ordenamiento Territorial desconoció su firma, por lo que interpuso una denuncia ante el Órgano Interno de Control de la dependencia el 9 de julio del 2017.
Un mes después, también denunció penalmente ante la Procuraduría General de la República contra quienes resulten responsables de este delito. Así inició el proceso de investigación.
Acusan firma verdadera
Peritos de la PGR determinaron que la firma del documento es verdadera, dijo Julio Hernández Barros, abogado de González Tiburcio. Por lo tanto, el denunciante pasó de denunciante a imputado por el delito de “falsedad de declaración”.
En entrevista con Animal Político, Hernández Barros afirmó que un año y cinco meses después de interponer esa denuncia, la PGR no le notificó a González Tiburcio sobre el cambio en el estatus jurídico, sino que hasta el pasado 3 de diciembre del 2018 solicitaron su presencia en la primera audiencia del 15 de enero del año en curso.
Aclaró que se presentó a la segunda audiencia del 24 de enero y también que no está siendo investigado por desvío de recursos, sino por falsedad de declaración.
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