La madrugada de ayer fue asesinado a balazos Samir Flores Soberanes, uno de los principales opositores a la Planta Termoeléctrica y Gasoducto de Huexca, en Morelos.
El activista era propietario de la radio comunitaria Amillzintko y miembro del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y Agua Morelos-Puebla-Tlaxcala (FPDTA-MPT), grupo opositor al Plan Integral Morelos (PIM).
De acuerdo con la Fiscalía General del Estado (FGE), el homicida de Flores llegó hasta su domicilio, en el poblado de Amilcingo, municipio de Temoac, alrededor de las 05:00 horas y a bordo de un auto Sentra, junto con otros hombres armados.
Cuando Samir salía de su casa rumbo a su jornada de labriego, fue sorprendido con varios disparos, de los cuales uno le pegó en la cabeza y el activista cayó herido de muerte.
Según las autoridades, el pistolero dejó un mensaje antes de huir, en el que un grupo denominado Comando Tlahuica se adjudica el homicidio.
El crimen de Samir fue condenado por diversas organizaciones que se oponen al funcionamiento de la termoeléctrica, porque suponen que su asesinato está vinculado con su participación en las movilizaciones para rechazar el PIM.
Ve AMLO interés político
El presidente Andrés Manuel López Obrador sostuvo que posiblemente uno de los objetivos del asesinato del activista es afectar la realización de la consulta ciudadana para decidir sobre ese proyecto.
“No sabemos también con qué intención se cometió este horrendo crimen, a lo mejor entre las posibilidades era afectar la realización de la consulta”, expresó el mandatario en conferencia de prensa desde Apodaca, Nuevo León.
El Presidente afirmó que la consulta del 23 y 24 de febrero se realizará, ya que es un proceso acordado en asamblea con los pobladores de Puebla, Tlaxcala y Morelos.
Agregó que ya se informó a la gente y tienen todos los elementos, “no podríamos detener la consulta porque no sabemos también con qué intención se cometió este horrendo crimen”, justificó López Obrador.
Por su parte, la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, detalló que cuando tengan más elementos darán información.
Los senadores de Morena Salomón Jara y Lucía Virginia Meza coincidieron en que el crimen pretende desestabilizar la entidad y enrarecer el clima para la consulta.
“Nunca hemos creído que las diferencias políticas, de opinión, tengan que resolverse, dirimirse a través de la violencia. Por eso nosotros exigimos que se esclarezca este crimen, para que la sociedad, la organización de la que él formaba parte también, tenga conocimiento de quiénes o quién fue el que cometió este crimen”, afirmó Salomón Jara.
Los legisladores exigieron que a la brevedad la Fiscalía de Morelos y la General de la República (FGR) investiguen los hechos para deslindar responsabilidades y para que se llegue hasta las últimas consecuencias en este caso, sin importar “si son de extrema izquierda o conservadores [los responsables], exigimos justicia”, dijo Meza Guzmán.
Por su parte, el gobierno de Morelos condenó el ataque al activista y señaló que el caso es investigado por la Fiscalía General del Estado, en colaboración con autoridades federales, y se ha iniciado las investigaciones correspondientes para dar con los responsables del crimen.
“La Comisión Estatal de Seguridad Pública (CES) ha detectado que en el municipio de Temoac hay un alto índice de grupos delictivos que operan por esa región, por lo que no se ha desechado ninguna línea de investigación”, señaló en un comunicado.
Comunidad señala al Estado por muerte de Samir Flores
En la comunidad no hay duda: fue el Estado. Todos están ciertos de que Samir Flores, el segundo en importancia del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua Morelos, Puebla, Tlaxcala (FPDTA-MPT), fue acribillado por su oposición a la puesta en operación de la planta termoeléctrica, un gasoducto y un acueducto.
En su pueblo y los municipios contiguos de la zona Oriente del estado, por donde pasa el gasoducto que viene de Tlaxcala para conectarse con la termoeléctrica de Huexca, reconocen la combatividad de este hombre. A su féretro lo rodean hombres y mujeres, le llevan flores pero en vez de rezos y oraciones, elevan consignas para mantener la resistencia popular: “Samir vive, la lucha sigue y sigue”, gritan los dolientes y aplauden al féretro.
Samantha César, habitante de Amilcingo e integrante del FPDTA-MPT, afirma que los pueblos de Morelos hacen responsable al Estado mexicano del crimen de su compañero, y considera que esa fue la respuesta oficial ante la actividad de Samir contra la consulta ordenada por el presidente Andrés Manuel López Obrador sobre el Proyecto Integral Morelos, la cual se realizará el 23 y 24 de febrero.
Para los vecinos y líderes comunitarios, el señalamiento de la Fiscalía General del Estado, en el sentido de que los homicidas de Samir pertenecen al crimen organizado, es sólo una treta con fines de desviar la atención y la responsabilidad del Estado.
Los vecinos de la calle Vinh Flores dicen que faltaban unos tres minutos para la seis de la mañana cuando escucharon cuatro detonaciones de arma de fuego. “Fui uno de los primeros en llegar al lugar y nunca vi la cartulina que supuestamente dejaron con un mensaje del crimen organizado”, dice un lugareño, quien reserva su nombre.
En el sitio hay un ramo de flores marchito por el sol, una veladora a medio quemar y una fotografía con el cuerpo de Samir delante de la iglesia de Amilcingo.
El asesinato fue condenado por Jorge Zapata, nieto del general Emiliano Zapata Salazar, quien llamó a defenderse “con todo” para impedir la consulta.