Estados Unidos.- El pasado viernes 22 de noviembre, Tesla Motors, la compañía de autos eléctricos propiedad del visionario Elon Musk, presentó su nueva camioneta tipo “Pick Up” llamada Cybertruck.

Y si bien el vehículo llamó la atención por su diseño futurista y sus características de potencia, el punto más polémico de la noche fue cuando Franz von Holzhausen, un diseñador de Tesla, probó la resistencia de los cristales de la camioneta, que supuestamente debían ser indestructibles, pero que se hicieron añicos al ser impactados por una esfera de metal.

Este hecho le dio mala publicidad a la Cybertruck, que además fue criticada por su peculiar diseño.

Pues ha sido hasta la noche del domingo 24 de noviembre cuando Elon Musk ha confirmado la razón por la que el vidrio no respondió como se esperaba.

De acuerdo con la explicación que dio a través de la red social Twitter, el problema fue que antes de hacer la prueba con la esfera de metal, habían demostrado la fortaleza de los paneles laterales del vehúculo al golpearlos con un gran martillo industrial. Esto habría dañado la base y la estructura de los vidrios, lo que impidió que la esfera rebotara después. De hecho, Musk dijo que se hubieran evitado todo el problema si hubieran realizado primera la prueba de los vidrios, y después la de los paneles.

Inclusive, Musk también compartió un video en el que muestra la primera prueba que hicieron con los vidrios de la Cybertruck antes del evento oficial, y se ve como el cristal soporta el impacto sin problemas.

Además, Elon también aseguró que el diseño de la camioneta responde precisamente a la fortaleza de los paneles de metal, que son del mismo tipo de los que se usan en los cohetes espaciales de SpaceX, otra de las empresas de su propiedad, y que debido a su resistencia, no se pueden doblar, por lo que el diseño les exigía ser lo más plano posible.

Pues a pesar de todas estas polémicas, Elon Musk reveló que hasta el momento se han registrado 200 mil preventas de la Cybertruck, cuyas unidades serán entregadas en 2021, y que tendrá un costo final de 40 mil dólares, unos 800 mil pesos mexicanos.

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