Como un papá entregado, dedicado a su familia y cariñoso es como van a recordar sus hijos a Luis Fernández Vega. El empresario leonés, fundador de Industrial San Sebastián falleció el pasado 7 de abril a los 89 años.

Marcela, su hija menor, compartió algunos aspectos personales, en tanto que Carlos, actual directivo de la compañía, detalló los inicios empresariales de su papá. 

Para él la familia era un valor grande, al igual que la religión que fundamentaron su vida”, recuerda.

Expusieron que a su papá le gustaba encontrar la belleza en lo simple, ayudar a los demás pero de forma discreta. Ayudó a mucha gente, sobre todo a escuelas, pero siempre lo hizo de manera reservada. 

Recordaron que era un amante de la naturaleza, fue uno de los pioneros en el buceo, los primeros tanques de oxígeno los tenían que llevar a San Luis Potosí, tardando hasta diez horas en el llenado, eso fue hace más de 50 años.

 La foto familiar de Luis Fernández Vega junto a sus hijos y nietos. Foto: cortesía de la familia.

A sus hijos los llevaba de campamento para convivir con la naturaleza, fue amante del mar, era de sus lugares favoritos. Le gustaba la cacería, se mantuvo activo y en forma hasta sus últimos días. Era un hombre que se ejercitaba a diario, actividad que les inculcó. 

Sus hijos, lo reconocen como un hombre de fe, que los acercó a Dios, la religión fue importante en su vida. Fernández Vega fue un abuelo cariñoso con sus 10 nietos, quienes lo adoraban, los acompañó en su niñez. 

Luis Fernández tomaba parte activa en las convivencias navideñas. Foto: Cortesía de la familia.

En el fraccionamiento que vivía, le llamaban el abuelo de la colonia, porque salía a caminar con sus nietos en los jardines del cluster. Hace seis años le diagnosticaron demencia senil, situación que fue deteriorando su salud, pese a ésto se mantuvo activo hasta el final. 

Me enseñó a cumplir mis metas, ser una persona disciplinada y tener todos los días actividades por hacer”, recordó Marcela su hijia 

Un matrimonio de toda la vida

El empresario y su esposa, Luz María Castellano, se conocieron en la escuela Francoinglesa de la que eran estudiantes. Ella era originaria de Guadalajara, al llegar a León lo conoció y se casaron en 1958. 

En su boda, Luis Fernández Vega y Luz María Castellano. Foto: Cortesía de la familia. 

La hermana de Lucita era maestra de la academia, algo tuvo que ver con su historia, recordaron sus hijos. El matrimonio estuvo unido por más de 60 años, hasta julio del 2020 cuando falleció Lucita como le decían de cariño. 

Juntos formaron una familia con seis hijos: Luis (Q.E.P.D.), Mariana, Martha, Carlos, Óscar y Marcela. 

Como padre, fue estricto -pero no regañón-, nos dio su ejemplo con su forma de actuar”, señalaron sus hijos. 

Trayectoria empresarial

Luis Fernández Vega comenzó con su fábrica de agujetas en 1965, en ese momento con 12 trabajadores junto con tío como socio fundador.

Al poco tiempo Fernández Vega absorbió la empresa, años después adquirió los terrenos en los que actualmente está instalada, actualmente suman 150 colaboradores. 

Fernández Vega y su esposa tuvieron seis hijos: Luis (Q.E.P.D.), Mariana, Martha, Carlos, Óscar y Marcela. Foto: Cortesía de la familia.

Carlos, hijo del empresario, destacó que en el rubro de agujetas, cordones y cintas son de las firmas más grandes. Al terminar la carrera de Administración de Empresas, Carlos y su hermana Martha se incorporaron a la compañía, un poco forzados por la situación.

En ese momento su papá  era militante del Partido Acción Nacional y colaboró como regidor de León, durante la Presidencia Municipal de Carlos Medina Plascencia (1989-1991). Posteriormente participó con Vicente Fox, en sus aspiraciones a la gubernatura de Guanajuato, que a la postre Fox perdió. 

Fernández Vega, estuvo tres años como Diputado Federal, fue su debut y despedida en el tema político, señaló su hijo, la política lo decepcionó. En ese entonces decía que el país no tenía remedio.  Después de la actividad política, se mantuvo pendiente de la empresa, acudió a la fábrica mientras su salud se lo permitió, hasta hace siete años. 

La visión de mi papá fue clara, trabajó para su gente velando por sus intereses y trató de ayudarlos de la mejor manera”, refirió Carlos.

Reconoció que a raíz del fallecimiento de su papá, hubo muestras de cariño de los colaboradores en activo y retirados. Incluso en la entrada de la planta está dibujado grafitti con el fundador y su esposa que actualmente luce un enorme moño negro, en señal de duelo. 

Fue un hombre de bien que nos enseñó a ser honestos, ayudar al prójimo en silencio”, finalizó Carlos. 

Luz María Castellano fue el amor de la vida de Luis Fernández Vega. Foto: Cortesía de la familia
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Luz María Castellano fue el amor de la vida de Luis Fernández Vega. Foto: Cortesía de la familia
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Luz María Castellano fue el amor de la vida de Luis Fernández Vega. Foto: Cortesía de la familia
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Luz María Castellano fue el amor de la vida de Luis Fernández Vega. Foto: Cortesía de la familia
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