Cuando se espera un hijo(a), hay muchas ideas y deseos sobre dicha personita y su futuro, basadas en la ideología de sus padres.
Y, ¿qué sucede cuando al crecer no cumplen con las expectativas creadas? Generalmente la decepción los padres es mayúscula al considerar que algo hicieron mal, que esa personita se les salió de control y todos los sueños creados se destruyeron… ¿por qué sucede esto?
Suele suceder porque los padres están educados para formar personas con una ideología impuesta sin considerar que cada ser humano es independiente, trae consigo su ser formado, toma decisiones, siente y sólo hace falta que en su desarrollo aflore toda esa información y comience a vivirla; con ello, puede cambiar la historia de vida planeada por sus progenitores pero eso, no es su responsabilidad, solamente lo es ser ella o él misma(o) y construir su vida.
Por ello, los padres requieren entender que el crecimiento y desarrollo de sus hijo(a)s no está en su control, son sólo guías y acompañantes pero requieren tener en cuenta que, hagan lo que hagan sus hijas(o)s, seguirán siendo aquellos seres que mientras crecían en el vientre y que al verles de frente les despertaron ese nuevo tipo de amor que sólo un hijo despierta; sus ojos, manos, cara, su ser entero sigue siendo el mismo que amaron desde un principio.
Todo esto lo digo para enfocarme en ¿qué crees que cambia si tu hija o hijo es homosexual? Realmente nada, lo único diferente es la idea que tenías, puesto que ideabas historias de vida con tus hijo(a)s a través de ti y no de ello(a)s.
Pareciera que la orientación sexual cambia el amor de padres y entonces vienen situaciones dolorosas ya que nos han educado en una sociedad donde la heterosexualidad es la aparente norma y de no ser así, sale la homofobia, el rechazo y desprecio.
Realmente la orientación sexual no cambia en nada a la persona, simplemente su amor, sus emociones están dirigidas a personas que tú no amarías, de ahí en más las personas homosexuales, bisexuales o heterosexuales, seguimos teniendo las mismas capacidades, aptitudes, estilos de vida y demás; por desgracia, la diversidad sexual está rodeada de mitos y prejuicios que hacen que continuemos rechazando personas.
Es importante a nivel social y más a nivel familiar, todos esperamos que nuestros padres apoyen, cuiden, acompañen en la vida, festejando, riendo, llorando según la situación y etapa de vida pero cuando alguno se niega a hacerlo por una situación que no está bajo el control de nadie, ya que la orientación sexual nos viene “de fábrica” podría decirse, el asunto es más grave.
De por si el rechazo social nos hace sentir muy mal, si viene desde los padres, el dolor es más fuerte; con todo el respeto y amor les digo que ese rechazo viene de la ignorancia.
No aceptar a un hijo(a) homosexual tiene grandes repercusiones en su salud mental y física, científicamente se sabe que tienen más riesgo de alcoholismo, drogadicción, prostitución, contraer infecciones de transmisión sexual, suicidio, fracasos de vida y cualquier conducta autodestructiva. Sin mencionar lo que sucede con los padres.
Con el afán de que el entendimiento y respeto entre padres e hijo(a)s crezca y deje de haber casos de suicidio y autodestrucción, les invito a acudir a un grupo de ayuda para padres y familiares que tengan personas homosexuales, a quienes no comprenden y rechazan; será en la ciudad de Irapuato el 25 de febrero, es el grupo Familias por la Diversidad Guanajuato, lo pueden buscar en facebook para mayor información o bien, comuníquense conmigo para darles datos.
Lo más importante es dejar de juzgar lo que no conocemos y acercarnos a gente con experiencia como estos padres que han pasado por el proceso y que ahora están en disposición de compartir con las demás personas su experiencia por el bien presente y futuro de sus hija(o)s y de la nuestra sociedad.