Parece que la famosa presa de La Tranquilidad es un tema muerto. Pasan los días y las 23 hectáreas que se compraron en la zona de Burrones siguen ociosas.
La Presa de la Tranquilidad es un proyecto comenzó con viento a su favor en el periodo del pasado Consejo presidido por Sealtiel Ávalos Santoyo, quien realizó la compra de los terrenos.
Se platica que con la llegada de Juan Sebastián Ávila Victoria al Simapag, apenas hace cinco meses, el tema de la presa no camina, ya que los actuales directivos no tienen capacidad para atender los problemas de los capitalinos.
Incluso se dice que Humberto Carlo Navarro de Alba, delegado de la Conagua en Guanajuato, no sabe cómo responder a los medios cuando le preguntan de la presa porque en 2016 no llegó ni un solo peso, para comenzar los trabajos de construcción.
Así que en la Presidencia hay regidores que dicen que el tema de la Presa es un proyecto muerto.
Incluso se rumora que aparecieron unos vivales que se están apropiando de los terrenos de la presa con el pretexto de que quienes vendieron al Simapag, no eran los legítimos propietarios. Habrá que esperar si hay alguna demanda.
También toman en cuenta en la casona municipal que algunos regidores de la Comisión de Desarrollo Rural, integrada por el panista Luis Guillermo Torres Saucedo, como presidente; así como Iovana de los Ángeles Rocha, secretaria e integrante de la fracción del PRI; además de los vocales Gabino Carbajo Zúñiga, del PRI; Marco Antonio Carrillo Contreras, del PVEM y Julio Ortiz Vázquez, del PRD, están cansados de las quejas que llegan de las comunidades por la falta de agua potable.
En el Simapag cuando los habitantes de las comunidades rurales presentan una queja por la falta de agua, la respuesta es la misma, que no tienen intervención. Ni modo, los problemas en la zona rural continuarán y cada vez más agudos.
Se comenta que estos días el alcalde capitalino Édgar Castro acompañó al presidente del Consejo del Simapag, Juan Sebastián Avila, a la Cámara de Diputados para tratar de buscar remanentes para proyectos hidráulicos entre ellos La Tranquilidad.
Se comenta en la casona municipal que pese a que en el Simapag se hacen intentos desesperados en la Cámara de Diputados para buscar recursos para la presa de La Tranquilidad, la realidad es que a este proyecto, al menos en la Administración que resta de Enrique Peña Nieto, no se le ve futuro. Ojalá que nos equivoquemos.
UG y los recortes
En la Universidad de Guanajuato están preocupados por los recortes presupuestales para el 2017.
Este año la UG ejerce en total sobre 4 mil 487 millones de pesos, y todavía no hay certeza para lo que viene. De entrada la batalla será por, al menos, mantener el mismo presupuesto que tienen en 2016.
La importancia del tema es mayúscula, la Máxima Casa de Estudios del Estado atiende hoy a unos 34 mil estudiantes en cuatro campus: Guanajuato, León, Irapuato-Salamanca y el de Celaya-Salvatierra, además de las 10 Escuelas de Nivel Medio Superior distribuidas en nueve municipios del estado.
En el nivel superior el ciclo 2015-2016 registró 23,155 alumnos. De esos 9,662 eran en el Campus Guanajuato; le siguen 4,967 en el de Irapuato-Salamanca; 4,627 en León y 3,899 en Celaya-Salvatierra.
Por ese motivo el rector de la UG, Luis Felipe Guerrero Agripino, acompañó hace unos días al gobernador Márquez a Palacio Nacional con el secretario de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña. Al otro día el Rector y la diputada federal leonesa y coordinadora de la bancada del PAN por Guanajuato, Alejandra Gutiérrez, estuvieron con el subsecretario de Egresos, Fernando Galindo.
Del presupuesto total de la UG para este año la cantidad de 1,599 millones de pesos tienen su origen en subsidio Federal ordinario, además de otros 353 millones de Fondos Concursables a nivel Federal.
Los focos de alerta están en que el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación que envió el Ejecutivo Federal a la Cámara de Diputados incluye un recorte a varios fondos de universidades.
Por ejemplo el fondo creado en 2002 para apoyar los sistemas de pensiones, desaparece. La UG no está en el colapso pero sí hay focos amarillos, por lo que el Rector anunció el viernes que en conjunto con las dos asociaciones sindicales presentará un proyecto integral para fortalecer el régimen de pensiones.
Por todo eso el 25 de octubre el rector de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Gilberto Herrera, encabezó con estudiantes y académicos una concentración masiva en sus instalaciones para manifestar el rechazo a la pretensión de disminuir recursos para las instituciones públicas en el País.
El rector de la UNAM, Enrique Graue, también ya hizo un llamado a no tocar a las universidades.
Y el viernes en la Universidad de Guanajuato hubo asamblea de la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (Contu) que suma a los 92 sindicatos académicos y administrativos de las universidad públicas del País y se pronunciaron fuerte por el rechazo a los recortes presupuestales.
La infraestructura atorada
Desde principios del 2016 Guerrero Agripino encabezó reuniones con diputados locales y federales pretendiendo sensibilizarlos sobre la necesidad de recursos para proyectos prioritarios. El presupuesto de este año ya estaba etiquetado y difícilmente llegaría más durante el año, lo cabildeaban para 2017.
En la carpeta de proyectos de infraestructura estratégicos que le entregaron a los legisladores está para León: El Centro de Información en su primera etapa, en la sede San Carlos, que ocupa de 60 millones de pesos. También el Edificio de Aulas en su segundo y tercer nivel por 90 millones de pesos, y la Torres de Estacionamiento también de San Carlos con un costo de 105 millones de pesos.
En León el desarrollo de la infraestructura es fundamental para poder crecer la matrícula. Hoy en León la UG sólo acepta a uno de cada cinco aspirantes que presenta examen para alguna de las licenciaturas. Para el actual ciclo escolar hicieron examen 4 mil 336 y aceptaron a 807, apenas un 18.6 por ciento.
El porcentaje de aceptación es el más bajo de los cuatro Campus que tiene la UG en la entidad. El rector en León, Carlos Hidalgo Valadez, está consciente de la demanda pero es complejo atenderla.
En el tintero hay otros planes ambiciosos como la Red Estatal de Alta Velocidad para incrementar la capacidad de ancho de banda de la red UG de 150 Mb a 10,240 Mb que ocupa de casi 50 millones.
Otras obras son infraestructura vial en la sede Marfil del Campus Guanajuato; arrancar el Complejo Multidisciplinario de la División de Ciencias Naturales y Exactas del Campus Guanajuato; el Laboratorio de Veterinaria etapa 3 y un Laboratorio de Investigación etapa 2 en la sede El Copal del Campus Irapuato-Salamanca; el Edificio Multidisciplinario etapa 2 sede Palo Blanco en ese Campus.
La carta a los reyes incluye la etapa 3 de Edificio Multidisciplinario y el Edificio Polideportivo del Campus Celaya-Salvatierra. Además de obras en las preparatorias de Moroleón, Irapuato y León. En unos días quedará definido lo que les toque del PEF y después el respaldo que venga del Estado.
De todo eso ya veremos para qué les alcanza con la planeación del presupuesto para el 2017. Una cosa positiva sí debe traer estos tiempos difíciles, donde haya que ‘apretarse el cinturón’, deben hacerlo ya.