Durante la semana pasada los temas tratados con interés fueron los del día contra la homo-trans y bifobia, por lo que se dio la oportunidad de tratar este tema que ha sido desde tabú a tema controvertido. Sin lugar a dudas, la nueva ética de los Derechos Humanos nos plantea como valor principal el respeto por las personas, animales y entorno, por lo que considero de alto interés poder hablar y discutir este tipo de temas, desgraciadamente también los hechos ocurridos contra periodistas en el país vienen a empañar las vivencias de libertad que nos merecemos vivir.
Me parece muy importante dejar atrás los mitos y estar más al día de la información, sobre todo, la científica que tenemos a la mano, y hacer acciones para vivir mejor en un mundo libre de violencia para mujeres y también para los hombres, en fin, para este que es nuestro hogar.
A propósito de nuestro hogar: la tierra, El Día Mundial del Reciclaje se inició en Texas en el año 1994, luego se unió México en el año 1998. Y a partir de ese momento la necesidad de impulsar el reciclaje se extendió a todos los países del mundo.
Entonces, la iniciativa de celebrar el 17 de mayo como el Día Internacional del reciclaje tiene como fin promover entre los ciudadanos del globo una mayor responsabilidad sobre la materia y los desechos que dañan la naturaleza. Esto da continuidad al artículo anterior en el que tratamos sobre un Irapuato Limpio. En el programa se debe tener un apartado educativo y operativo para lograr reciclar.
La palabra “reciclaje” se entiende como el proceso por el cual una materia o producto ya utilizado, en principio destinado al deshecho, se somete a un tratamiento para obtener una materia prima o un nuevo producto. Es decir, un desecho que se vuelve a introducir en el ciclo de vida, lo cual permite hacer un mejor uso de los recursos naturales, reducir el impacto medioambiental de nuestros hábitos de consumo e idear formas creativas de rediseñar nuestros objetos y darles nueva vida. Esto es darle una renovación y esperanza de mejor vida con los recursos del planeta.
La producción de basura aumenta sin cesar desde hace un siglo. De no ser tratados adecuadamente los residuos sólidos, pueden constituir una importante amenaza para el medio ambiente. Esto va en contra de la cultura de úsese y tírese, tan en boga en nuestro tiempo, generando un gran peligro para la sustentabilidad de nuestro planeta.
Para reducir los desechos lo más importante es lograr la reducción de la cantidad de residuos generados y fomentar el reciclaje, pero lamentablemente este objetivo sigue estando lejos en muchos países. Según indica la Guía para la elaboración de estrategias nacionales de gestión de residuos elaborada por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA), la mitad de la población mundial, no tienen acceso a servicios de gestión de residuos, de manera que el vertido incontrolado sigue siendo el método de eliminación de residuos predominante en la mayoría de los países de bajos y medianos ingresos, por ello los programas de nuestro municipio deben incluir estos temas y hacer eco a lo que mundialmente se hace, si es que de verdad queremos ser una ciudad que garantice una calidad de vida sustentable.
Antes de terminar mi comentario quiero hacer referencia al evento de recepción de Monseñor Enrique Díaz, Segundo Obispo de Irapuato, de quien hemos conocido su currículum lo que hace que crezca la esperanza de tener un líder social-religioso que venga a dar una mejora a nuestra ciudad; que todas las personas puedan ser escuchadas y se vea fortalecido el tejido social de nuestra ciudad, que podamos ejercer las virtudes cristianas y ciudadanas. Es muy probable que la semilla sembrada por el ilustre irapuatense Samuel Ruiz pueda florecer en su tierra natal. La calidad la hacemos las personas, no las cosas.
Hace trece años se consolidó el sueño, tenido por mucho tiempo por la comunidad católica de Irapuato de tener una sede episcopal en la ciudad; se consideró un logro y se realizaron obras materiales significativas: hoy se cuenta con Catedral y Seminario, entre otras más. Esperamos que esta segunda etapa concuerde con la Iglesia de Juan que es la Iglesia del amor.
¡Por la Construcción de una Cultura de Paz!