En mi último escrito traté de dar una visión lo más completa posible (historia de las casas y las personas y familias que las habitaban), de la calle de ‘Allende’ (anteriormente conocida como ‘del vía crucis’) en sus tramos que van, de su esquina con la calle ‘5 de febrero’ (nombre anterior, ‘calle de la piedra lisa’) hasta la calle ‘Altamirano’ (nombre anterior ‘la chancla de Vieyra’, tenía otro pero no lo conozco) y, de esta, hasta la avenida Guerrero (nombre anterior ‘calle del camino real’). Doy por asentado que ya señalé la importancia que tiene el recuperar los nombres originales pues ellos nos dan información de parte de nuestra historia común. Ahora platicaré sobre los tramos de la calle que van, igualmente, desde sus esquinas con, primero, la calle ‘5 de febrero’, segundo, con la calle ‘Altamirano’ y, tercero, con la Avenida ‘Guerrero’, pero, ahora, en la acera de enfrente, la que da al norte y que empieza con un terreno baldío que compró don Claudio Gómez en la esquina de ‘Allende’ y ‘5 de febrero’. Poco después construyó cuatro casas para rentarlas, supongo; en la de la última esquina mencionada vivió algún tiempo el Doctor Vicente López Díaz con su familia (en la actualidad, una parte, la que da a ‘5 de feb…’ está un local con venta de refacciones, cd’s y demás, el señor Durán con su hijo. Sobre la calle de Allende, la siguiente fue habitada, primero, por el radiólogo Antonio Torres Durán y su familia, luego por el Doctor José de Jesús (‘Cochecho’ para todos) Puente Pérez (+) con su esposa ‘Rorro’ y algunos de sus pequeños hijos; posteriormente en esa casa vivió la señora Agripina Martínez, esposa de don Pepe Martínez dueño de la ‘Cerillera del Centro’, fabricante de los cerillos ‘La Central’ ubicada en la Calzada de la Industria, donde actualmente tiene sus oficinas el ingeniero Antonio Leal de la Rosa.
La casa siguiente fue habitada por un tiempo por la señora Teté Gómez de Lavandeira con sus pequeñas hijas Tere y Mely, las que sufrieron mucho pues se demostró la presencia real de Satanás por lo que un sacerdote Redentorista, de apellido Córdoba, fue y con el Santísimo Sacramento de la Eucaristía rezó el ‘Exorcismo’ con el que despareció esa presencia satánica. Durante otro tiempo vivió el fontanero Manuel Mosqueda con su familia; posteriormente y hasta la fecha vive la familia del Licenciado Rubén Vela Fuerte (+), su esposa Tere Zapién y sus hijas. Enseguida había dos casas, una de una sola planta habitada por la familia Guerrero: Willy, la Güera y familia. La otra, de dos pisos en la que vivía el matrimonio español formado por Don Ramón y su esposa Josefina Cangas los que eran visitados frecuentemente por sus sobrinas capitalinas ‘Chivis’ y Estela, me parece que de apellido Palavicini; este matrimonio era familiar de la Señora Lugarda (Lugardita) Cangas, familia muy conocida en Irapuato. Lugardita casó con el señor Manuel Guerrero Barber quien falleció muy pronto y, sin descendencia, Lugardita casó luego con el señor Luis Gámez, igual muy conocido en Irapuato. Luego estaba una casa propiedad de don Evaristo Cortés; en ella vivió un matrimonio ya mayor de edad y luego fue rentada por don Leopoldo Alfaro para ahí vivir con su familia. Poco tiempo después, un grupo de matrimonios irapuatenses lograron que las Religiosas del Colegio Motolinía (fundada la Congregación por la R. M. Dolores Echevarría) se establecieran en Irapuato. Mi papá, Juan N. Martín, pidió a Don Evaristo Cortés la casa para que ahí viviera la primera comunidad de esa Congragación Religiosa: la Madre Lupe Zavala, Superiora; la madre Lola Denetro, la Madre Delia Canales y otras religiosas cuyos nombres no recuerdo. Luego, la comunidad pasó a vivir un tiempo en la casa (deshabitada, ya), de la familia del Doctor David Araujo, en la calle de 5 de febrero y la vecina señora Nieves de Duque, abrió una puerta entre las dos casas para que las religiosas vivieran más ampliamente.
Las casa descritas donde vivieron las familias Guerrero, Cangas y la cas propiedad de do Evaristo Cortés, fueron compradas por don Pedro Rodríguez las que demolió y en su lugar construyó un edificio de apartamentos con una larga vida pues, existente todavía, ahí vivieron familias y personas muy conocidas de Irapuato entre las que recuerdo algunas: el Doctor Jacobo Burstin y familia; Lic. Luis Héctor Fuerte Vaca y fam.; José Luis Alcalde y fam.; Raúl Hervás y fam.; Doctor Francisco Flores Jaime y fam.; María de Jesús Pérez Campos con su hermano Daniel; la mamá de los hermanos Vargas Covarrubias –Lorenzo, Claudia y Margarita, Margarita, esposa de don Pedro Vargas Covarrubias; las familias Juaristi, Balboa y más que en otra ocasión escribiré.
Más adelante, en otro trabajo de escritura, continuaré comentando sobre las familias que vivían enseguida de estas casas: Vieyra (actualmente casa-museo); García (actualmente oficinas de las Farmacias San Francisco de Asís; Ruiz Abascal (actualmente Liceo Cervantino); Garmendia Patiño (actualmente escuela Flores Magón; Cortés (Guillermo Lupe y Adolfo) actualmente propiedad de la familia Mendoza); Martín Ruiz (en esa casa nací), ahora vive ahí el Doctor David Araujo; Velázquez (Don Ramón, Anita su esposa y Consuelo su hija), posteriormente vivió la familia del Doctor Franco y así, hasta llegar a la esquina de la calle de Allende con la calle Altamirano.
Gracias y continuaré. Como siempre, solicito correcciones y/o adiciones a estos comentarios pues estas historias son de Irapuato. Igual, si desean una plática sobre la historia de Irapuato o arte en general; así mismo realizar una visita al centro histórico un grupo de personas. Comuníquense conmigo a través de mi correo electrónico que aparece abajo.
Irapuato, Gto., junio del 2017
Arq. Javier Martín Ruiz
Cronista de Irapuato