El 28 de enero de 1948, un aeroplano con trabajadores mexicanos que iban a ser repatriados se estrelló en Los Gatos Canyon, California. Algunos de estos trabajadores habían llegado a los Estados Unidos mediante el programa Bracero con el cual México apoyó a la agricultura norteamericana durante la Segunda Guerra Mundial. La prensa que cubrió el accidente sólo mencionó los nombres de los agentes estadounidenses que murieron, a las victimas mexicanas simplemente les llamaron deportados. Al cantautor Woody Guthrie (1912-1967) esto le pareció un acto de desprecio. Guthrie es uno de los mayores cantantes de protesta de los Estados Unidos, algunas de sus canciones son This land is your land y Old Man Trump. La primera fue cantada por Lady Gaga al inicio de su intervención en el medio tiempo del Súper Bowl LI y la segunda la compuso en contra de Fred Trump, padre del actual presidente de los Estados Unidos.
Woody Guthrie compuso una canción para protestar por la forma de referirse a los trabajadores mexicanos muertos en Los Gatos Canyon. Él sabía que referirse a las víctimas meramente como deportados, las convertía en un ente abstracto, sin personalidad y deshumanizado. Al llamarlos con un nombre genérico y con una carga negativa (deportados implica que habían cometido un delito, en este caso la migración ilegal, cosa que no era cierta) era una muestra más del racismo que sufrían los inmigrantes mexicanos en Estados Unidos. La canción se llama Deportee, y lo importante es que en ella Guthrie les da nombres a las víctimas. Puede que no sean los nombres reales (no se podían saber) pero con este acto trata de devolver su condición de seres humanos a esas personas fallecidas. Su canción quiere mostrar que los inmigrantes que murieron eran personas como todas las demás personas. Una de las primeras acciones que se hacen para deshumanizar a un grupo es tratar de que se olvide que son individuos como nosotros, por lo trato se les asigna un nombre colectivo. Una línea de la canción dice: “Los persiguen como a forajidos, como a criminales, y a ladrones.” Vale la pena recordar esta canción en estos tiempos donde el discurso racista viene desde la más alta cúpula del gobierno norteamericano.
Recomiendo escuchar la versión de esta canción hecha por Joan Baez y la realizada por el súper grupo de country The Highwaymen integrado por Johnny Cash, Willie Nelson, Waylon Jennings y Kris Kristofferson. En lo personal me conmueve ese intento de humanizar a los inmigrantes ilegales por parte de cantantes estadounidenses ya que demuestra que así como existe gente con ideas despreciables también hay gente que se solidariza con personas que no son de su mismo país, personas a las que pueden llamar amigos.