Últimamente se habla mucho de Miss España 2018, Ángela Ponce, quien hasta hace algunos años se llamaba Ángel Ponce, pues nació siendo hombre.
Hoy, Ángela -con todos los requisitos jurídicos que le permiten acreditarse como mujer en España- buscará la corona de Miss Universo el próximo 16 de diciembre.
Ya en 2015, Ángela había ganado el concurso de Miss Cádiz. Sin embargo, en ese momento las reglas de participación en esos concursos de belleza no permitían la participación de transexuales, por lo que le fue retirado el triunfo.
Ángela no cesó en su intento por lograr trascender y por supuesto buscar consolidar sus sueños.
De una cosa estoy seguro y es el hecho de que difícilmente ha tenido una historia rosa persiguiendo sus sueños, más bien puedo asegurar que siempre ha sido cuesta arriba.
Siempre he pensado que hemos vivido engañados. Sistemáticamente nos han repetido que “todos somos iguales” y al respecto sólo puedo que eso es mentira. Por el contrario, todos somos distintos y eso no está mal. Lo que sí está mal es que como sociedad no seamos capaces de crear espacios donde quepamos todos con todo y nuestras diferencias. Todos tenemos derecho a lograr nuestros objetivos y ser felices, que de eso se trata la vida ¿no?, de buscar ser felices y si nuestro camino a ella no daña a nadie, porque no podemos hacerlo. ¿Por qué los derechos de algunos pueden valer más que los de otros? Eso no debería pasar. Una democracia y un Estado fuerte no es aquel donde las mayorías callan a las minorías, sino uno donde todas las voces puedan expresarse de manera libre sin miedo o peligro de hacerlo.
Se que el tema levanta ámpula. Me queda claro que mucha gente está totalmente en desacuerdo en que un hombre transexual participe en un concurso de belleza femenino. Por supuesto que respeto eso. Sin embargo, me parece que hay particularmente 3 factores que no podemos obviar:
El primero tiene que ver con que legalmente Ángela es mujer. Cumplió con todos los requisitos médicos y legales para poder ser acreditada de esa forma.
El segundo factor tiene que ver con que el Concurso Miss Universo -desde tiempos en que era dirigido por Donald Trump- cambió las reglas de participación y permite expresamente que mujeres transgénero puedan participar en el concurso.
El tercer factor para considerar es el hecho de que Ángela ganó el concurso de Miss España. Es decir, si no hubiera ganado dudo que se hubiera hecho el escándalo que hay hoy en día.
Si analizamos los puntos anteriores no veo porque el escándalo de este asunto.
¿Qué no era mujer? Pues ahora lo es. Eso dice su tarjeta de identificación oficial de España.
¿Qué por qué participa en Miss Universo? Pues por qué las reglas del concurso lo permiten y entonces si alguien no está de acuerdo pues tiene la opción de no participar o bien cobijarse en el concurso de Miss Mundo, por ejemplo, el cual de manera expresa dice que para que puedan participar sólo mujeres por nacimiento. Así que aquí quien se inscribe acepta de facto competir contra mujeres por nacimiento o por cambio de género.
Y es que ganó. Así de fácil. Para un jurado integrado por varias personas, ellos vieron en ella las condiciones necesarias para representar a España en el referido concurso. Es decir, no fue una decisión unilateral, fue colegiada y aun así ganó.
Como referencia el Comité Olímpico Internacional -COI- permite la participación transgénero en deportes olímpicos, si cumplen con algunos parámetros. Me cuesta un poco de trabajo pensar que una mujer que fue hombre saque ventaja en un concurso de belleza, al igual que no creo que en el caso de los deportes olímpicos una mujer que participe en la categoría de varones tenga alguna ventaja clara.
Tal vez al revés si pudiera haber alguna ventaja. Es decir, una mujer que fue hombre tal vez tendría alguna ventaja en el caso de los deportes, por su propia naturaleza constitutiva.
Definitivamente es un tema que da para debatir, pero valdría la pena hacerlo siempre teniendo en cuenta que hablamos de personas, de sueños y no es justo afectar sólo porque no estoy de acuerdo con algunas posturas.
Como sea, el 29 de junio fecha en que se llevó a cabo el concurso en España, quedará marcado en la historia de temas de inclusión y tolerancia. Para un sentido o el otro, pero no volverá a ser igual el debate.