Actualmente la industria del calzado vive uno de sus momentos más complicados en cuanto a los volúmenes de producción.
Incremento en las importaciones, reducción de aranceles, bajo crecimiento en la economía nacional y reducción en sus exportaciones son los principales factores detrás de la disminución en la fabricación de zapato, sobre todo aquel calzado dirigido a un mercado que sigue teniendo como único valor agregado el ofrecer un precio bajo, ese único factor que le permite mantener la relación con varios de sus compradores, pese a ocasionar una cada vez menor ganancia, pues mientras sus insumos y servicios primarios se encarecen, el fabricante tiene que mantener su precio, por temor a que el comprador rompa relación de negocios, y comience a sumarse a aquellos que consumen zapato asiático por ofrecerse muy por debajo de lo que un empresario en México puede ponerlo a la venta.
En la primera mitad del semestre concluido en junio, el PIB de la industria cayó un 5%, acumulando tres trimestres consecutivos en caída, ubicándolo en un estatus de una recesión técnica.
Las importaciones tuvieron un crecimiento del 12% al corte de mayo en comparación con el mismo periodo del año pasado, al quinto mes de este año ingresaron 43.4 millones de pares a México, cifra mayor a lo registrado en el mismo periodo del año pasado, cuando registró 38.8 millones de pares, de acuerdo a los datos generados por la CICEG.
El presidente ejecutivo, Alejandro Gómez Tamez, compartió hace unos días que una pérdida de 7 mil millones de pesos al año es el impacto que tendrían las recaudaciones de impuestos, de continuar con la desgravación de aranceles para importaciones de productos textiles y de calzado.
El panorama
Desafortunadamente en esta situación está inmerso más del 50% de los fabricantes de calzado, pero otro importante porcentaje vive otra realidad, al que es cierto la situación que vive México también les ha causado menores ventas, pero en las exportaciones siguen presentes no solamente en Estados Unidos, sino en países europeos, y sobre todo no compiten contra las importaciones de China y Vietnam al ofrecer un producto que va a un nicho de mercado de menor tamaño, pero con mejores ganancias.
Este calzado tiene un diferenciador que puede ser el tipo de piel o materiales utilizados o por tratarse de una empresa que ha sabido trabajar en la construcción de su marca y el consumidor no pone pero al costo de su producto.
Hace unos días en el FOROGO3 de la Cofoce, le preguntaba a Salim Ismail, director ejecutivo, fundador y embajador global de Singularity University cómo hacer para que un sector tan tradicional en León como es el del calzado a su destacada experiencia en la manufacturera le pusiera ese plus con el uso de tecnología para ofrecer un zapato con innovación.
Me decía que es la clave para que un producto pueda pasar de costar por darle un ejemplo 500 pesos a ofrecerse hasta 3,500 pesos el par, y no solamente en México, sino en el extranjero.
Comentaba por ejemplo que sería atractivo un calzado que simplemente con tener un chip integrado pudiera darle a información al dueño de su peso, estatura, su estado de salud, y hasta consejos de qué actividades hacer y alimentos consumir para mantener su salud en línea.
Y no es el único caso en el mundo existen diversas empresas que han marcado un antes y un después al atreverse a un calzado atractivo, cómodo y calidad integrarle un diferenciador de innovación tecnológica o creativo como ha sucedido en marcas que han logrado un éxito al realizar un zapato que apuesta por la nostalgia, y luego termina ofreciéndole también a los hijos de esos padres que ya tenía conquistados al hacerles recordar un momento inolvidable de su vida.
¿Cómo hacerlo?
Luego de la charla me pregunté por qué razón si la industria en León hace un zapato que es valorado en varias partes del mundo, hoy existen pocos casos de empresas que hagan alianzas con centros de Innovación como el CIATEC o aprovechen al máximo la existencia de un Centro de Innovación y Diseño ubicado en la CICEG, por ahí existe un caso de una empresa local que tenemos conocimiento que pronto lanzará un producto de desarrollo justamente con el CIATEC, pero como la iniciativa privada, como las autoridades de gobierno podrían impulsar a que cada vez existan más casos de este tipo.