Constantemente me preguntaba si algún día nuestro país podría hacer realidad el tan anhelado “derecho universal a la salud”, ese que viene plasmado en el artículo 25° de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en el 4° de nuestra Constitución Política.

Desde el primer minuto de este 2020 inició funciones el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), organismo público federal encargado de garantizar servicios de salud gratuitos y de calidad a más de 69 millones de mexicanas y mexicanos que no cuentan con seguridad social.

El reto no es menor. Nos debe quedar claro que brindar cobertura a tantos millones de personas no será tarea fácil ni se logrará de un día para el otro. Pero el primer paso está dado. 

Con la voluntad política del Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, con la convicción de legisladoras y legisladores de la 4a. Transformación y con el enorme compromiso de un gabinete con sentido social que entiende la urgencia de hacer de la salud un derecho universal, es que hoy materializamos el INSABI.

Claro que es un hecho histórico para nuestro país. Nunca antes se había, siquiera pretendido, echar a andar un sistema de salud como éste: universal, con visión social, con absoluta gratuidad e incluyente; por el contrario, durante mucho tiempo saquearon, desmantelaron y privatizaron el sector salud. 

Por el contrario, desde hoy la atención, medicamentos e insumos serán gratuitos para todas y todos los pacientes, ese es el objetivo del INSABI, incluso para aquellas personas que viven con padecimientos que generan gastos catastróficos, como el cáncer, el VIH y otras enfermedades que se irán incluyendo.

Las personas sin seguridad social ya no necesitan afiliarse ni pagar cuotas para recibir atención médica y medicamentos, bastará contar con credencial para votar (INE), Clave Única de Registro de Población (CURP) o presentar acta de nacimiento para tener acceso a sus derechos en materia de salud.

El INSABI utilizará la infraestructura hospitalaria actual -misma que deberá ampliarse- y recuperará gradualmente más de 230 clínicas, centros de salud y hospitales que están en el abandono, aunado a ello, aprovechará la experiencia de quienes laboraban bajo el Régimen Estatal de Protección Social en Salud (REPSS), aumentará el personal sanitario y basificará a 87 mil trabajadoras y trabajadores del sistema.

Se fortalecerá el primer nivel de atención, con énfasis en la prevención de enfermedades y la promoción de la salud, es decir, que las personas se mantengan sanas, se vigilará que no falten medicamentos y que se cuente con equipos de alta tecnología, además de que actuará bajo el modelo de Atención Primaria en Salud (SABI).

Para lograrlo será necesario también sumar todos los esfuerzos y recursos posibles, por ello se crearán Redes Integradas de Servicios de Salud (RISS) con todas las instituciones públicas del sector, de tal forma que en zonas determinadas trabajen junto al INSABI, el IMSS, el ISSSTE, PEMEX, SEDENA y la Marina, así como los organismos de salud de las entidades federativas.

Se buscará que en ningún momento se interrumpa la atención médica, para ello, el presupuesto anual cuenta con un incremento alrededor de 40 mil millones de pesos para este 2020.

Esta es la recuperación del sentido público del sector salud: poner en el centro a la gente en mayor vulnerabilidad, dignificar la atención a las y los pacientes, terminar con prácticas burocráticas, con presiones políticas e inercias históricas que dañaron gravemente al sistema de salud.

Bien harían en hacer una sincera autocrítica aquellas voces que apuestan al fracaso del sistema de salud público mexicano y reconocer que el antiguo Seguro Popular, si bien permitió avanzar en determinadas áreas, no cumplió con su objetivo fundamental: garantizar el derecho universal a la salud.

Con el INSABI ponemos fin a ese modelo fraccionado, clasista, excluyente y discriminatorio. Es la recuperación del sentido público de la salud.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *