Desde hace aproximadamente diez años, si no es que poco antes, se ha complicado el problema de la seguridad pública en el Municipio de León, reflejándose en el incremento del índice delictivo de manera incesante desde entonces. Ya se ha hecho énfasis en diversos reportajes, análisis, artículos y editoriales de la manera en que se ha ido tratando de resolver esta contingencia criminal que afecta gravemente a los leoneses y mantiene en vilo su tranquilidad.
Primeramente fueron los robos a transeúntes constantes en varias zonas de la ciudad, pero luego vinieron en cascada los robos a negocios, comercios y oficinas en gran parte de la zona Centro y en algunas avenidas que se han tornado con el tiempo en áreas comerciales. Luego vinieron los robos a casas habitación por doquier, incluyendo fraccionamientos cerrados y con seguridad privada, constituyendo este rubro uno de los aspectos más lacerantes para la sociedad, puesto que se trata del lugar más sagrado con que contamos los ciudadanos para encontrar seguridad, paz, tranquilidad y bienestar: nuestro hogar. A grado tal que hasta se reformó el Código Penal para beneficiar a las posibles víctimas con la legítima defensa presuntiva cuando el ataque criminal fuera en estos lugares. Luego vinieron las oleadas de Homicidios imparables: hasta doce al día.
Materialmente este aspecto de las políticas públicas en el Municipio se convirtió en el “Talón de Aquiles” de las administraciones municipales. Desafortunadamente se han intentado diversas estrategias, pero siempre plasmadas a base de medidas parciales y truncadas por cambios constantes en la titularidad en la Secretaría de Seguridad Pública. Así sucedió durante la administración del Lic. Ricardo Sheffield, con tres cambios de Secretarios; también en la administración de la Lic. Bárbara Botello, con tres Secretarios titulares de esa encomienda; así como también en la administración actual que pronto terminará a cargo del Lic. Héctor López Santillana. Lo cual denota una falta de continuidad, estabilidad y permanencia en los mandos, estrategias, estructura, operación, programas y acciones en ese rubro.
Actualmente, después de las elecciones del pasado mes de junio, y de los resultados que favorecieron al Partido Acción Nacional y a su entonces candidata Alejandra Gutiérrez Campos, ahora Alcaldesa electa, la situación de la seguridad pública local será una de las prioridades en su administración, porque la situación así lo amerita y porque así lo ha manifestado; sin embargo, se desconoce su plan de trabajo o su programa a desarrollar, pues no ha adelantado ni un ápice del mismo y asevera que lo hará después de tomar posesión el 10 de octubre próximo.
Lo que si podemos constatar es que en diversas reuniones con las organizaciones civiles de la ciudad, en entrevistas, en conferencias que ha impartido, manifiesta con firmeza que habrá cambios radicales o sustanciales en seguridad pública, con reestructura en todos sus ámbitos administrativos, dando a entender que habrá una “limpia”, de tal manera que repercutió en el ánimo de los actuales funcionarios de esa dependencia, puesto que definitivamente quienes hemos estado de cerca observando la actuación en esas áreas de varios funcionarios durante los últimos dos años es notorio el trabajo y progreso en relación con el periodo anterior; resultando menester mencionar a la disciplina del Comandante Jorge Guillén, al reordenamiento y registros actualizados en Regulación de Seguridad Privada; en la Academia de Policía, donde se fijó la meta para incrementar el número de elementos graduados listos para integrarse a la corporación; faltando solamente cuatrocientos para su consecución; en Prevención del Delito; además de la labor en la Dirección de Tránsito y en la Subsecretaría a cargo del abogado Mario Rodríguez Mariscal, quien hizo notar sus buenos oficios.
No obstante lo anterior se había venido filtrando que el actual Secretario Lic. Mario Bravo Arrona, sería ratificado en el cargo, pero a raíz de las acotaciones que ha hecho la Lic. Alejandra Gutiérrez, pareciera que no; además de que no habría lógica en esa posibilidad, ya que por un lado se habla de una reestructura y cambios en dicha Secretaría, por lo que nos preguntaríamos qué caso tendría para el Lic. Bravo Arrona continuar en un cargo sin el equipo humano con el que ha obtenido ciertos avances y logros. El último episodio de esta semana precisamente lo protagonizaron el Alcalde Héctor López Santillana pues el martes en el evento de graduación de agentes de Policía y Tránsito, insinuó que este funcionario mencionado repetiría en el cargo (columna Asteriscos. A.2. 30/09/21 A.M.); pero la Lic. Alejandra Gutiérrez rápido y segura al día siguiente declaró: “con mucho respeto, quien decide (debió decir decidirá) a partir del día 10 de octubre soy yo”, enmendándole la plana a López Santillana. De allí la incertidumbre sobre la suerte que correrá la conformación y estructura de esta Secretaría de Seguridad Pública. Ojalá y ahora sí le den al clavo, por el bien de los leoneses.