¿Llegará o no llegará? Todos los ojos estarán puestos hoy en el Reclusorio Norte, a donde está citado a comparecer Emilio Lozoya. El juez que lleva su caso ordenó que el ex director de Pemex se presente en el Centro de Justicia Penal Federal, en punto de las 9:00 horas.

Luego de 16 meses de que volvió al país, Lozoya le ha estado viendo la cara, perdón, le ha estado dando largas a la FGR. Tan es así, que desde que inició su proceso le han dado ¡cinco prórrogas! dizque para juntar las pruebas de las acusaciones que ha lanzado contra integrantes del gobierno de Enrique Peña, así como de legisladores de la oposición.

El caso se convirtió en la bandera de Andrés Manuel López Obrador en su supuesta lucha contra la corrupción. De los dichos del ex funcionario como testigo colaborador han surgido nombres, cifras y conspiraciones, pero ningún resultado concreto. No vaya a ser que Lozoya, como la cebolla, al final de tantas capas no tenga nada.

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Dos cosas han quedado claras en la COP26. La primera, que el mundo se encamina a una auténtica crisis climática. Y la segunda, que al gobierno de México le tiene sin el menor cuidado.

Con eso de que la 4T no ve más allá del 2024, ha sido notorio el desdén hacia la reunión de Glasgow contra el cambio climático. De entrada, la ausencia del Presidente, que se explica porque cree que el ecologismo fue un invento neoliberal. AMLO prefirió tomarse unos días de asueto en su rancho, antes que asistir con otros jefes de Estado a la cumbre que busca soluciones al mayor problema del planeta. Pero el colmo es que la titular de Medio Ambiente, María Luisa Albores, llegará ¡una semana tarde!, porque tiene que comparecer en San Lázaro. Esas son sus prioridades.

Además, el gobernador Samuel García exhibió en sus redes la falta de protagonismo mexicano en la COP26, pues no hay un solo pabellón, stand o ni siquiera un puesto de tacos por parte del gobierno mexicano. Entonces, ¿a qué fuimos?

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Quién sabe si a Marko Cortés hay que reconocerle su honestidad o su derrotismo. Como sea, hasta a sus propios compañeros de partido sorprendió al decir que el PAN no tiene parque para pelear en 2022 y sólo podrá ganar una de las seis gubernaturas en juego.

Le llovieron críticas blanquiazules al michoacano, empezando por el queretano Francisco “Pancho” Domínguez, que trae en la mira tomar las riendas del panismo y, en una de ésas, hasta ser candidato presidencial.

Donde también pusieron el grito en el cielo fue en el PRD, pues Jesús Zambrano salió corriendo a tratar de resucitar la alianza opositora sin la cual sabe que su partido desaparecería. ¿Y los priístas? Callan como momias aunque ya no sea Halloween.

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