En jaque restauranteros
En México tenemos una inflación de 7.72%, el porcentaje más alto desde hace 22 años.
El porcentaje es de acuerdo al Inegi en su información compartida apenas la semana pasada.
Y a pesar de que, es uno de los más altos en la historia, se espera que siga creciendo; con decirle que analistas de Citibanamex confirmaron sus proyecciones al alza de la inflación general para cierre de este año en 6.8%, y una tasa de interés de referencia en 8.50% y hay especialistas que proyectan que sea hasta de un 9%, muy por arriba del 7.63% que era la expectativa del mercado en un escenario ya complicado.
Grupos financieros como Monex estiman que entre el próximo mes y junio estemos llegando en México al 8% de inflación.
Platicando con propietarios y colaboradores de un par de restaurantes en León mencionan que para los pequeños negocios comienza a ser insostenible el cubrir los constantes incrementos en los principales alimentos de la canasta básica sin poder reflejar en el precio final del platillo al consumidor, acción que por ahora es riesgosa, y un lujo poder plasmarla, ante lo que consideran, sería alargar más aún la recuperación de los daños causados por la pandemia en 2020 y 2021.
Dilema de aumentar precios
Si aumentamos los precios, van a reducir los consumos, y eso es aún peor, por lo que la mayoría preferimos “apechugar” los incrementos, me dijo uno de ellos.
Algo que me llamó la atención es que en corto me decían que sí han tenido que cambiar en algunos casos de proveedores que les ofrezcan un menor precio y también han tenido que retirar algunos platillos o ingredientes en su menú con la finalidad de no aumentar sus precios.
Una postal que cada vez es más común en negocios como fondas y taquerías es ver cartulinas donde se da aviso que a partir de tal fecha habrá un aumento en los precios para que sus clientes vayan preparando su siguiente compra.
Al inicio de esta semana justamente Elizabeth Vargas, la presidenta de la Canaco en León, mencionaba que si existía una preocupación por la oleada de aumentos en productos, servicios, alimentos que torna difícil mantener los precios finales, pero que coincidía en que la mayoría han tenido que hacerlo así, y comentó que la esperanza es que el Gobierno federal proponga políticas adecuadas para “amortiguar” el impacto, situación que para muchos es de dudar.
Será antes de que termine esta semana que el Gobierno federal comparta cuál es ese plan para controlar 25 productos de la canasta básica.
Naves industriales a la medida
La personalización ha sido una estrategia efectiva en mayor parte de los sectores para un crecimiento de las marcas que la ofrecen y en el sector inmobiliario industrial no es la excepción.
En los primeros tres meses de este año, Guanajuato por ejemplo registró una demanda bruta de 208 mil 247 metros cuadrados de superficie industrial y en Querétaro de 179,714 metros cuadrados, siendo las entidades con mejor recuperación en el Bajío, de acuerdo a los datos que comparte Solili.
Para Pablo López, experto, de una de las claves han sido los desarrollos hechos a la medida, incluso comentó que hoy tiene más preponderancia los proyectos hechos a la medida que los propios espacios especulativos.
En parques industriales como Puerto Interior, Castro del Río, PILBA, Colinas es común ver este tipo de construcciones creadas acorde a las necesidades que comúnmente tienen las industrias que mayor desarrollo tienen en El Bajío, prácticamente se trata de espacios como el modelo de negocio que ofrecen las franquicias de llave en mano, listas para operar.