La científica

Si acaso se le puede creer a la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum Pardo, la ciudad capital que gobierna es un paraíso en el que no hay crimen, no hay problemas, y su genial Administración lo hace todo a la perfección, logrando así que sus habitantes vivan en una verídica utopía.
Por lo menos eso afirmó en la parte pública de su visita de campaña a Monterrey el sábado. Hubo un componente privado de la visita también, pero de eso no se sabe lo transcurrido y para el caso no importa, suelen decirse muchas cosas en esas reuniones, pero al final son -cuando mucho- sólo un puñado de votos… o no.
Nos vino a la mente el famoso dicho: “El quién eres lo determina con quién te juntas”. Nos acordamos en esta visita y tras escuchar de presentes el contenido de su roll… er, plática, que en el ya famoso y muy difundido libro de la periodista Elena Chávez , “El Rey del Cash”, la señora Sheinbaum recibe numerosas menciones en relación a su cercanía con el “transformador”, al que le rinde abundante pleitesía y la autora la identifica en esa obra como “La científica”, toda vez que la susodicha tiene una licenciatura en FÍSICA y un posgrado en Ingeniería, haciendo una estancia en el Laboratorio Nacional Lawrence Berkeley, en California.
Una de sus posturas públicas en su reciente visita fue la de que en la comarca nuevoleonesa hay mucho apoyo para continuar con la Cuarta Transformación. Quién sabe quién le haya comunicado lo anterior a la señora Sheinbaum o de dónde lo haya sacado, pero si “La científica” se tomara la molestia de revisar los resultados electorales de la reciente elección local constatará que -por lo menos en las urnas- no existe NINGÚN apoyo para tan divisiva y polarizante ideología a la que ella pretende darle continuidad, la cual es claramente anti empresarial. Por lo mismo, se puede afirmar que la dama fue a Monterrey a mencionar la SOGA en casa del ahorcado.
Conviene señalar, a estas alturas del relato, que a este su h. servidor le importa menos que un bledo quién es -o no es- la corcholata premiada con la postulación a la Presidencia por parte de Morena. Los “tres favoritos” mencionados son igualmente objetables, por lo mismo que ya les hemos comentado, porque se nos presentan como un “copy/paste” del que se va a su rancho después del 24 -uno espera- y no muestran personalidad o IDEAS propias. Su “mérito”, si es que acaso así se le puede llamar, es mostrarnos a los mexicanos quién de ellos es el más “igual” al actual, y quién de ellos se prestaría más para decretar un nuevo “maximato”.
Reza la anécdota histórica: “El Presidente vive aquí (señalando a Palacio Nacional), pero el que MANDA vive enfrente”.
Quizás, pudiera ser, en el paraíso donde Sheinbaum gobierna (la mitad del territorio) hay muchas simpatías para el continuismo, pero NO en Nuevo León, y como la señora estuvo en ese Estado, debemos señalar -y lo haríamos con cualquier candidato que espetara las mismas ideas- no existe el más mínimo deseo ALLÁ por continuar las políticas destructivas, divisivas, polarizantes y económicamente aberrantes que ha emprendido este Gobierno llamado de la Cuarta Tormentación.
Continuar con el FRACASO no implica MÉRITO alguno, e igual hacer permanente la violencia y la corrupción (el Guacamayazo ha sacado a relucir que nuestros cuerpos del orden están podridos hasta la médula), y en gran parte a ello se debe -la complicidad- el que los índices de VIOLENCIA, ejecuciones, asesinatos, etcétera, alcancen niveles récord en el País. (Bien podrá afirmar la señora que en la Capital los delitos del fuero común se han reducido bajo su iluminada Administración, pero como siempre el ganeo está en el conteo). O continuar con el estancamiento económico, la PÉRDIDA de empleos, la estrepitosa caída en la INVERSIÓN, los conflictos con empresas extranjeras, los arbitrajes que ha perdido la CFE (donde ella laboró) y las millonadas en dólares que se ha visto forzada a INDEMNIZAR.
¿Cómo puede creer ella, siendo “científica”, que alguien en su sano juicio desee que continúen estas políticas erradas de cabo a rabo? ¡Al contrario, lo que requerimos en México es un CAMBIO radical!, un retorno a la razón, a la concordia, a la democracia participativa, a la transparencia, políticas sensatas que le pongan FIN a la impunidad, madre de la violencia, que RESTITUYA su independencia y FORTALEZA a nuestras instituciones.
Para ser exitoso, México debe hacer a un lado el “caudillazgo” y fortalecer sus instituciones. Los gobernantes van y vienen, las instituciones perduran, y son las que hacen fuertes a los Gobiernos democráticos.
Los caudillazgos -como el que hoy defiende y dice querer hacer perdurar-, son figuras políticas caducas, propias de las tiranías y no de las democracias.
Si México ha de progresar, de crecer, de elevar el nivel de vida de sus ciudadanos lo debe hacer bajo el amparo de los sistemas DEMOCRÁTICOS. Mas no una democracia fingida, manipulada, una que inicia y termina en las urnas donde se depositan votos controlados por dádivas de dinero público, sino una genuina, que no compra votos ni voluntades, que HACE LIBRES a sus ciudadanos, y no los esclaviza con el anclaje de explotación económica a su condición de miseria y carencias.
Si acaso regresa a Nuevo León la dama, que diga LO QUE ELLA PIENSA Y CREE, no lo que predica su Tlatoani, algo que ya sabemos que NO FUNCIONA para nada.