León es un mercado enorme de dos millones de habitantes. Por décadas, en este espacio he presentado datos de cómo se comporta la comunidad leonesa. Hace unos tres años presenté una encuesta sobre las actividades recreativas que tenemos, animado por aquellas que gozaba cuando la Fiera, nuestro equipo de futbol, sufría por 10 años el infierno de la segunda división.
Y así medimos las preferencias por actividades culturales, lúdicas, culturales, deportivas, el shopping, entre otros. Allí aparecía el potencial de mercado del basquetbol y de torneos deportivos que pudieran jugarse en el Domo de la Feria, por ejemplo.
El basquetbol aparecía siempre en segundo lugar, después del futbol varonil y siempre arriba del beisbol, el futbol femenil y superando con mucho al box, atletismo, patinaje, etc. Y no solo es por tener un espacio físico tan idóneo como el Domo, sino porque es un deporte que se presta para comercializar marcas, productos deportivos, alimentos, entre otros. El basquetbol tiene en México su segmento de mercado en las clases medias que están dispuestas a gastar en un entretenimiento que es altamente atractivo, y en una ciudad viva, como es la nuestra, donde la identidad se nutre de los colores verdes.
Sí, somos trabajadores en León. El trabajo todo lo vence, dirían también sobre las abejas cuando hacen su colmena, pero aunque el nombre fue importado, sí refleja la identidad leonesa.
El equipo Abejas de Guanajuato debutó como equipo en el año 2009 en la LNBP (Liga Nacional de Baloncesto Profesional) pero jugando en la ciudad de Guanajuato. Y como aquí lo mencionaba, para ferias de libro, eventos culturales, centros comerciales, vida universitaria, León es muchísimo más atractivo. Supera en decenas y decenas de veces a la ciudad de Guanajuato. Por ello, a partir de la temporada 2016-2017 se mudan a la ciudad de León bajo el nombre de Abejas de León, conducidos por Alejandro Marcocchio, quien intuyó el enorme potencial para que trajera al equipo a esta ciudad que con mucho es la más importante del Bajío.
Me consta que no fue fácil lograrlo. Era traer un nombre que tenía poco o nada que ver con nuestra ciudad. Asistí como algunos a las primeras temporadas y a sus primeros resultados. Iniciaron un trabajo paciente de promoción en escuelas, de captación de patrocinadores y con un propósito genuino de hacer nacer el cariño al equipo haciendo labor social. Por eso es que, al pedírselo a Alejandro, vinieron a la Ciudad del Niño Don Bosco a convivir en una charla interactiva sus jugadores con cientos de nuestros menores sobre el “proyecto de vida”, para terminar con una “cascarita” de encestes.
El basquetbol requiere por su rapidez y pericia, de un enorme trabajo en equipo, así como rotación en puestos. Cuerpo técnico calificado como la dupla española que conduce la estrategia, para aprovechar el talento deportivo de estos gigantes de dos metros de altura que nos emocionan al escuchar el nombre de nuestra ciudad en las porras de los partidos de los martes y jueves.
En las dos últimas temporadas comencé a ver cada vez a más gente asistir a los partidos de las Abejas y a formarse un ejército de seguidores clasemedieros a los que nos emociona la velocidad de este deporte y vemos a un integrado equipo que incrementó la victoria hasta ser campeón regional y jugar la final en estos días con Jalisco, para ser campeón nacional.
Además del equipo varonil, Abejas tiene un representativo femenil que también da un buen espectáculo. Y aunque ambos están formados mayoritariamente por jugadores norteamericanos, la realidad en el mundo es que en este deporte no es tan sencillo competir, pues la altura y la cultura de dedicación no la tenemos.
Hace unos días que dialogaba con Alejandro, el dueño del equipo, le agradecía su generosidad (le pedí nos ayudara en la Ciudad de los Niños a arrancar el gimnasio techado (hoy auditorio) y le felicitaba por los resultados que son el fruto de cinco años de dedicación que hoy cosechan. Auguro por ello más éxitos para Las Abejas y aseguro que el arraigo y el cariño para el equipo seguirán creciendo y harán del basquetbol, otro atractivo para esta ciudad tan vibrante.
MTOP