El Intérprete 112: Diatribas presidenciales y su efecto. La sorpresa electoral en Estados Unidos. Y el final de una serie entrañable

De reformas, jueces y dignidad

Soy uno de los que piensa que las reformas al Instituto Nacional Electoral que promueve el Ejecutivo son contraproducentes y sobre todo, inoportunas. Ha sido evidente el desprecio de la 4T por los organismos autónomos y la constante postura del Presidente López Obrador en el sentido de que duplican funciones y encarecen la administración pública, pero creo que cualquier riesgo de que la competencia electoral vuelva a ser secuestrada por el Gobierno es inaceptable para el País.

Desde luego, puedo estar equivocado y por supuesto, quienes piensan distinto y en primer lugar el Gobierno federal, están en su derecho de exponer sus alternativas e intentar llevarlas a cabo. De eso se trata la política.

Donde no creo equivocarme es al considerar que ha sido penoso ver esta semana el espectáculo del primer Mandatario cuestionando, atacando, ofendiendo a quienes no están de acuerdo con él y que se volcaron este domingo a las calles del País. 
Que el debate de ideas se degrade es penoso, pero que el proceso se alimente desde Palacio Nacional es más lamentable todavía. Basta ver en los medios y en las ‘benditas’ redes sociales el nivel de la discusión para pensar que no corresponde a la mayor autoridad del País atizar ese fuego, ni siquiera si considera que beneficia a su causa: sería triste suponer que también esta pugna le viene como anillo al dedo.

Y es que los ajusticiamientos en el ‘paredón’ de la mañanera, como le llaman algunos, son el pan nuestro de cada día y algunos son reprochables. El jueves hubo un ejemplo evidente, cuando el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía, se lanzó contra la juez Karla María Macías Lovera, quien suspendió el paso de la Guardia Nacional al Ejército y que ya multó a la jefa de Mejía, la secretaria Rosa Icela Rodríguez.

Mejía acusó a Macías de poner en riesgo la seguridad del País y excederse en sus funciones. El presidente López Obrador compró de inmediato el boleto y le añadió el ‘condimento geográfico’ para arremeter contra Guanajuato: “Por ejemplo, la juez que concede un amparo para que no participe la Guardia Nacional en Guanajuato, es de Irapuato. Pero no sólo no votaron a favor de que participe el Ejército y Marina y la Guardia Nacional, no, ahora concediendo amparos para que no actúe. Además, sin facultades de la juez. ¿Y qué pasa? ¿Por qué se protege a estos jueces?”, cuestionó.

Llama la atención que esta administración, que presume ser tan diferente, se exprese igual que… la de Enrique Peña Nieto. Como comentamos hace algunas semanas, la juez Macías fue objeto en 2018 de fuertes ataques de parte de  la Secretaría de Marina, luego de imponer varias multas a su titular. Dos años antes, había ordenado abrir cuarteles militares para buscar a un hombre desaparecido en Pénjamo.

Y mientras los seguidores de la 4T atacaban sin piedad a la juez -¿dónde estabas en los sexenios anteriores?, la increpaba un ignorante- brilló la dignidad de la Comisionada Nacional de Búsqueda de Personas, Karla Quintana, quien dijo en Twitter sobre su tocaya: “la jueza Karla Macías es una de las mejores (si no es que la mejor) de este País. Ha emitido sentencias protectoras en defensa de los derechos humanos reconocidos en la Constitución, incluido el tema de desaparición. Todo mi reconocimiento y respeto a su trabajo”. Lo mismo desde aquí para la Comisionada.

Peor que nunca

Trato de no escribir todas las semanas acerca de la inseguridad, si los editores estamos ya saturados del tema, me puedo imaginar qué pensarán los lectores, algunos de ellos me lo han comentado. Además, con lo que publica hoy La Olla es más que suficiente. 

Pero que sì conste en este humilde análisis que a veces parece imposible que las cosas se descompongan más … y entonces ocurre. Las dos jornadas de bloqueos, la masacre en un antro de Apaseo el Alto, el constante asesinato de policías (ya rebesamos los 40 este año, una tragedia) y la muerte cada vez más frecuente de víctimas inocentes, es decir, todo lo que vivimos en la semana, conforman un cuadro dramático que ensombrece Guanajuato.

Frente al constante reclamo por la relativa inacción de las autoridades federales -y digo relativo porque siempre se acompaña de cumplidos a la coordinación con que se trabaja- seguramente sería mejor, como lo sugiere Juan Miguel Alcántara Soria, poner toda la carne al asador para la construcción de soluciones locales al problema. Si las autoridades no quieren o creen que no deben o pueden, por lo que fuera, sería muy saludable que nos explicaran las razones.

La sorpresa de las elecciones en EU

Cuentan que Joe Biden se cansó de recordar durante la campaña para las elecciones norteamericanas la historia de que cuando salía de casa de niño, su abuelo le pedía que mantuviera siempre la fe, pero que su abuela lo corregía y le gritaba: ‘¡No, Joey, difúndela!’.

El nieto cumplió con creces la demanda familiar. Veo en casi todos los análisis sobre el proceso que el llamado de Biden a defender la democracia fue fundamental en el sorpresivo resultado: la noche del sábado 12 se confirmó que los demócratas conservan el Senado y es la hora que no sabemos quién controlará la Cámara de Representantes, aunque lo que salta a la vista que la ‘marea roja’ que pronosticaban los republicanos nunca ocurrió.

Biden llamó la atención sobre el profundo significado del ataque contra el Congreso para impedir el desenlace del proceso de 2020, la incapacidad de Trump para reconocer su tropiezo, que lo llevó a inventar la historia del fraude y planteó a los norteamericanos que la elección era en realidad una lucha por recuperar la dignidad y la decencia.

El mensaje caló hondo, 44% de los votantes entrevistados en las urnas dijo que acudía por considerar que la democracia estaba amenazada y muchos de los más recalcitrantes negacionistas de la validez de los comicios de noviembre de hace dos años perdió ante sus rivales.

De acuerdo con los analistas, la decisión de la Suprema Corte de Justicia de desechar la libertad para abortar fue otro factor decisivo. Más allá de las respetables diferencias que provoca el tema, hay que considerar que el derecho estuvo vigente a lo largo de medio siglo y que muchas mujeres percibieron la decisión como un ataque a sus libertades, otro punto que fue bien explotado por los demócratas durante la campaña.

El maquiavelismo brilló también durante la campaña, ya que trascendió que grupos demócratas apoyaron en las elecciones internas de los republicanos a los aspirantes más radicales e impresentables. Algunos gracias a ese respaldo ganaron la postulación y casi todos, perdieron en la elección del martes 8.

El postre del proceso fue el descontón aplicado a Donald Trump. Muchos republicanos consideran que el ex Presidente es un factor de movilización para los votantes que se les oponen y que el proceso del martes fue la mejor prueba.

Además, al locuaz empresario le ha salido un rival de peso, el gobernador Ron DeSantis, lo que provocó una respuesta desencajada de Trump, quien amenazó de inmediato con revelar sus trapos sucios: “sé más de él que cualquier otra persona, salvo quizás su esposa”, amenazó. Está previsto que el magnate anuncie su candidatura a la Presidencia el martes, habrá que ver cómo se desarrolla este proceso. Solo un temor, como decía mi madre, y es el de que ‘otro vendrá que bueno te hará’: el video en el que el entonces trumpista DeSantis instruye a su hijo sobre la manera de construir el muro fronterizo, realizado hace cuatro años, tampoco permite esperar muchas cosas buenas.

¿Qué ver, qué leer?

Por un reportaje de El País me entero del final de “The good fight”, la magnífica serie que siguió los pasos de “The good wife” y terminó siendo una cosa completamente distinta, divertida y brillante.

Como bien explica el texto, en el trayecto de la serie fue fundamental no solo la victoria de Donald Trump, sino la derrota de Hillary Clinton, símbolo de la “buena esposa” de la serie que dio origen a esta otra.

En Prime México están las tres primeras temporadas, faltan otras tres, habrá que rastrearlas.

MCMH