León, Guanajuato.- No falla y es que desde hace muchos años, el olor que delata a los stands de oriente en la Feria de León es el incienso que se puede percibir a metros.
Al acercarme me prometieron toda una experiencia completa con música que invita a echarte una danza del vientre, además de inciensos que limpian las malas vibras y curan el mal de amores.
No solo por eso me acerqué, sino también porque tienen delineadores que todas adoramos: negros, con toque de misticismo y que incluyen una cátedra de cómo lograr una mirada de impacto.
Aziz Akkus es uno de los stands que muestra su variedad de productos, además de prendas que difícilmente se pueden adquirir fuera de ferias.
Eso me recordó mucho a una de las películas de Cantinflas, donde uno de los vendedores árabes es súper hábil para las ventas, ya lo traen en la sangre, no por ello tienen fama de ser prósperos en los negocios, lo digo porque me llevé varios artículos y sin intención de compra.
Todos los que vivimos en León recordamos esos puestos, que hace un tiempo, abundaban en la Expo Comercial, pero que ahora se han convertido en auténticos artículos de culto.
No solo se venden productos para lucir bien, sino también para estar bien con el espíritu: collares para el mal de ojo, piedras de orgonita: ori-gina-les.
Pendientes para la buena suerte, la prosperidad, el buen ánimo; lo padre es que el vendedor tiene historias fascinantes de cómo la fe y no tanto un amuleto, pueden cambiar tu vida.
Es una clase de historia de cómo muchas de las prendas cambiaron la historia de la humanidad, o cómo los reyes de antaño llevaron prendas que por sí mismas son fuente de prosperidad.
Pero para vivir la experiencia completa tienes que visitarlos, sus stands lo abren a partir de las 11 de la mañana y lo cierran después de las 10 de la noche.
Basta con echarse una platicada con los expositores para constatar todo lo que se puede aprender con una estadía en ese lugar.
Esta columna poco a poco llega a su fin, mañana les mostraré un balance de todo lo que fue la feria. Los veo hasta mañana por allá. ¡Adiosito!