Ya estamos en franca carrera electoral para el 2024. Es curioso cómo cuando se va a elegir a quien ocupará el puesto más importante de la vida pública del país evaluamos más a los candidatos por su carisma, sus promesas, nuestras filias y nuestras fobias, que por su trayectoria. En contraste con prácticamente cualquier empleo, para el puesto más importante de cualquier país —o uno de los más importantes— se suele obviar la hoja de vida de los postulantes y los resultados que éstos hubieren obtenido en sus puestos previos.
No pretendo en estas líneas hablar de la trayectoria política de quien fuera jefa de Gobierno de la Ciudad de México hasta hace unas semanas, pero sí de la Ciudad y los cambios que hubo durante su gestión.
Variables económicas hay muchas, pero hay dos que me parecen las más relevantes: producción y empleo. Cuando vean estos datos algunos argumentarán el choque de la pandemia, pero ese será solo un pretexto porque hay entidades que vivieron el cierre de forma similar a la Ciudad de México cuya recuperación fue más rápida.
La Ciudad de México es la entidad que más contribuye al PIB nacional. Casi 17 % de toda la producción se genera en la capital, prácticamente el doble de la producción del Estado de México, que es el estado que le sigue, y muy de cerca Nuevo León. La producción, en términos reales, es decir quitando el efecto inflacionario, a finales de 2018 fue 3.13 billones de pesos. El PIB estatal que genera el Inegi desafortunadamente tiene mucho rezago y el dato más reciente, el del cierre de 2021, muestra que durante ese año la producción de la Ciudad fue 2.94 billones.
Otra visión más oportuna de la producción la da el Indicador Trimestral de la Actividad Económica Estatal (ITAEE), que muestra que al cierre de 2022, la Ciudad de México se encontraba produciendo 94.67 % de lo que producía a finales de 2018. El rezago es evidente.
En cuanto a empleo el rezago ha sido similar. Cuando Sheinbaum empezó su administración, la Ciudad tenía registrados 3 millones 410 mil trabajadores en el IMSS, 16.9 % del registro total del país. Con los datos a mayo de este año (están por salir los de junio) hay registrados en la Ciudad 3 millones 434 mil trabajadores formales, un número similar al que se tenía hace casi cinco años.
En indicadores más completos, como el Índice de Competitividad Estatal que genera el IMCO, la CDMX sigue siendo, como lo ha sido prácticamente en todas las ediciones, la entidad más competitiva. Eso no significa que no haya pendientes, tampoco que la recuperación económica se haya concretado, y desde luego, no implica que las condiciones de vida de quienes aquí vivimos vayan en franca mejora.
@ValeriaMoy