EN EL CASO de la posible candidatura de Rommel Pacheco a la alcaldía de Mérida, la cuestión no es sólo si el clavadista lleva más partidos que olimpiadas, sino qué tiene Yucatán que genera tal interés tanto en la 4T como en el bloque opositor.

EL ATLETA de alto rendimiento, quien ya pasó por las filas del PRI y del PAN, se acaba de sumar a la campaña de Claudia Sheinbaum con la misión de sumarle votos a la corcholata morenista en esa entidad dominada por el panismo.

LA IDEA es que Pacheco pegue brincos sincronizados con el refuerzo ex tricolor Jorge Carlos Ramírez Marín para competir contra los buenos resultados del gobierno del panista Mauricio Vila y restarle fuerza a su candidato, Renán Barrera.

EL HECHO es que en tiempos del Tren Maya y del dominio morenista en el sureste, donde ya gobiernan Campeche, Chiapas, Quintana Roo y Tabasco, sólo les falta Yucatán para completar la planilla.

DE AHÍ que en la campaña yucateca se anticipa una lucha sin cuartel con más bombas que un domingo en el Paseo Montejo. ¡Mare!

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LA DECISIÓN que está a punto de tomar el INE sobre la cantidad de mujeres que deberán postular los partidos en las nueve entidades que cambiarán de gobierno el año próximo pondría en aprietos a quienes no se han tomado en serio la participación femenina en las elecciones.

EN EL CASO de Morena, si se confirma que al menos cinco mujeres deberán de contender por cada partido, tendrán que cambiar su estrategia que era la de postular a cinco hombres y cuatro mujeres, por lo que habrá al menos un aspirante que se quedará en la orilla aun si gana su “encuesta”.

DE HECHO, hay quienes dicen que el rival más débil sería Omar García Harfuch, quien tendría que ceder su espacio a Clara Brugada.

Y ES QUE se ve muy difícil que bajen de sus respectivas contiendas a consentidos presidenciales como el tabasqueño Javier May, el guanajuatense Ricardo Sheffield o el poblano Ignacio Mier para privilegiar al policía que recientemente salió embarrado por el caso Ayotzinapa.

INCLUSO matarían dos pájaros de un tiro, ya que además de hacerle caso al INE, desactivarían un posible conflicto interno pues Brugada y sus huestes son de armas tomar.

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CON ESO de que el IECM hará uno de los tres debates de candidatos a la Jefatura de Gobierno en alguno de los reclusorios capitalinos, hay quienes desde ahora ya están pidiendo garantías.

Y NO piden que les garanticen su seguridad, sino que les aseguren que una vez terminado el ejercicio, ¡los dejarán salir de ahí!

Gsz

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