La última medición que nos entregó SAPAL sobre las lluvias en nuestra ciudad indican que este año llevamos solo 304.99 litros por metro cuadrado, que es la peor cifra registrada desde el año 2015, pues el promedio en los últimos 9 años es de 672.8 

Si el año pasado había sido el más malo, este año pinta mucho peor. 

Es casi un hecho, a reserva de que pase algo extraordinario, que la Presa del Palote no solo no se volverá a llenar, sino que no recuperará su nivel mínimo para poder utilizarla para dotar de agua a algunas colonias de la zona norte de León, las cuales actualmente reciben el líquido en forma terciada.

Las decisiones en materia de abastecimiento y ahorro del agua ya no pueden esperar más la llegada de un proyecto salvador como lo quiso ser en su momento el Zapotillo, o la ilusión de recibir agua de la presa Solís mediante la modernización de los distritos de riego; los leoneses tenemos que empezar a tomar decisiones radicales ya, sin contratiempos ni consideraciones.

En ese sentido, la propuesta de tarifas de agua potable que aplicará el SAPAL para el año próximo, ya no soportan estar calculadas solamente en un ajuste inercial inflacionario, sobre todo para aquellos ciudadanos que consumen agua en mayores cantidades, y principalmente, para aquellos que la utilizan para actividades ajenas al consumo humano que no se consideran básicas.

Con esa finalidad, a la propuesta de tabla tarifaria hecha por el Consejo Directivo de la paramunicipal, el día de hoy en sesión de Ayuntamiento se aprobará la incorporación de un rango adicional que concentre a los grandes consumidores, y se les aplique un incremento mucho más alto que al grueso de la población.

De esta forma, así como a los consumidores de 0 a 10 m3 mensuales -que concentra el 65% de las cuentas de SAPAL y es en donde se encuentran los ciudadanos más vulnerables de la ciudad- no se les va a aplicar ningún incremento a la tarifa inicial y solo recibirán un ajuste mensual del .43%, a quienes consuman más de 21 m3 se les gravará con un aumento inicial del 4%, más un ajuste cada mes del .75%. Esto representará un acumulado anual cercano al 13%, contra el 4.73% anual que recibirán las cuentas de bajo consumo.

Con esto no se busca necesariamente obtener una mayor recaudación para SAPAL, pues más dinero no significa que haya más agua, más bien el mensaje que se quiere enviar la población es que, si no quieres pagar tanto de agua, pues empieza por ahorrarla y destinarla a solo actividades básicas. Si tienes un jardín, una alberca, lavas tu cochera o la calle a manguerazos, invariablemente te va a costar más, además de las multas aplicables por malgastar el agua.

El ahorro en el consumo de agua tendrá como consecuencia una mayor disponibilidad de litros a distribuirse entre toda la población, generando con ello un efecto subsidiario y solidario con la población que hoy en día no recibe el vital líquido de forma regular, pues no es justo que solo quienes puedan pagarla, puedan tenerla, y mucho menos desperdiciarla.

Este es solo un pequeño paso en la dirección correcta, que habrá reclamos y molestia, lo sabemos, pero salvaguardar los recursos naturales no renovables como es el agua está por encima de cualquier otro interés, el día cero no es un eslogan ni mucho menos una utopía, es una triste realidad que puede llegar a León si todos los ciudadanos seguimos pensando que no hay problema porque abrimos la llave y sale agua, cosa que hoy, muchos ciudadanos ya no disfrutan.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *