“En la guerra, la victoria rápida es el principal objetivo”.
Sun Tzu
Para el próximo año, la joya de la corona electoral -obviamente después de la Presidencia de la República- será la Ciudad de México.
En la cancha de la 4T, la cosa está definida. En la campaña no mandará la candidata Claudia Sheinbaum, sino los rudos que lograron saltarse a la exjefa de gobierno y terminaron imponiendo bajo el argumento de paridad de género a Clara Brugada.
Perfiles como el de Martí Batres, cuya “voz clonada por IA” vaticinaba justamente lo que terminó por suceder: esta fracción llegará con gran fuerza de decisión el próximo año, ensoberbecidos por su triunfo. Algunos de sus cercanos me cuentan que están apostando por una estrategia radical que va desde el espionaje, persecución de sus opositores, hasta el discurso polarizante de lucha de clase.
No les importan las clases medias y altas que saben perdidas por default en la Ciudad. La estrategia de moderación y acercamientos que garantizaba el triunfo con García Harfuch está pudriéndose en el bote de la basura frente a engolosinados asesores que están dispuestos a incendiar la pradera antes que ceder un ápice.
Aquí no les importa ganar votos moderando el discurso: no piensan ocultar su radicalismo y feligresía a López Obrador. La 4T chilanga no es para los ingratos “aspiracionistas” a los que ha dañado el supremo líder. ¡Que se jodan!
Aquí lo que importa es debilitar al máximo al adversario que hoy tiene nombre y apellido: Santiago Taboada.
Una ruptura de la Alianza garantizará la victoria de Brugada, cuyo escenario ideal sería el de ver a un PRI independiente robando votos al PAN-PRD. En unos días más veremos el tamaño de las lealtades entre el grupo opositor cuando se vote la ratificación de la Fiscal Ernestina Godoy que forzosamente requerirá votos de la oposición si quiere repetir su periodo.
Pero, aunque la Alianza se mantenga, claramente viene el reto de la disciplina, unidad y cobijo para Taboada, cosa que se ve difícil por ahora.
Y aunque por un milagro los egos políticos se atemperen y se trabaje con todo para apoyar al panista, viene el reto más difícil: una andanada de acusaciones de corrupción por el cártel inmobiliario, que construirá la narrativa de un candidato ambicioso y corrupto con toda clase de elementos de escándalo… Sí, incluso audios y videos, con IA o sin ella.
Por otro lado, de entre los poderes fácticos que se mueven en la Ciudad de México, el empresariado es de gran relevancia: apoyó con creces a García Harfuch bajo la promesa de que él sería el bueno y comenzaría un periodo de entendimiento con el nuevo gobierno. Hoy se sienten defraudados, pero lejos de tomar revanchas, parece que agachan la cabeza y no terminan de convencerse de hacer equipo con la oposición.
Si en el Frente Amplio siguen viviendo de la victoria pírrica del 2021, mejor que se vayan preparando para la derrota incontestable del 2024.
De Colofón
Y López Gatell, el “Doctor Muerte”, muy sonriente en la foto con Clara Brugada, ¿lo van a poner de qué?, ¿tan confiados están?… Al menos, Sheinbaum se quitó un buen lastre.
Y todavía faltan 197 días para la elección 2024.
@LuisCardenasMX