Con todo y que la FGR que encabeza Alejandro Gertz Manero está acusando al Poder Judicial de su reciente derrota en el caso legal por el Viaducto Bicentenario, hay evidencias claras de que se trató de un… ¡autogol!

Y es que la propia agente del Ministerio Público encargada del asunto, Jannette Castro, le solicitó a la SICT, de Jorge Nuño, que le informara si ese tramo de vialidad de paga operaba o no bajo un título de concesión legalmente otorgado.

Y desde el año pasado, la dependencia federal le contestó a la Fiscalía en un oficio que sí existe una concesión válida y vigente que, desde 1983, entregó el Estado de México.

De ahí que la prueba más contundente que tuvo el juez para desechar el caso de la FGR la puso sobre la mesa ¡la propia FGR!

*

El optimismo que tenía el PRIAN en los últimos días en cuanto al fallo de la Sala Regional del Tribunal Electoral Federal para salvar su coalición en Nuevo León se desmoronó ayer de golpe.

Y es que temprano empezaron versiones de que el fallo venía en contra de las tropas azules por no presentar documentación original certificada de la Comisión Permanente del CEN del PAN avalando la coalición, lo que por la tarde se confirmó.

Aunque queda un recurso de apelación ante la Sala Superior del Tribunal Federal Electoral, sin duda que el trancazo de ayer fue durísimo y por ahora deshace la alianza del PAN y el PRI para las elecciones en ese estado.

El meollo es que los tiempos apremian y los prianistas van contrarreloj, ya que el último día para registrar candidatos para las alcaldías y las diputaciones locales es el 20 de marzo y el arranque de las campañas es el 31 de este mismo mes.

*

Si ya de por sí las cosas estaban complicadas en Guerrero, ahora la fiscal estatal, Sandra Luz Valdovinos, sorprendió a propios y extraños al hacer valer su autonomía. Ante la petición de la gobernadora Evelyn Salgado para que deje el cargo, la funcionaria le dijo que no; y que, si quiere echarla, tendrá que recorrer todo el camino jurídico para que sea el Congreso el que la destituya.

Así que la mandataria morenista tendrá que seguir enfrentando la peor crisis de seguridad y gobernabilidad de su administración con un nuevo titular de Seguridad Pública, otro recién llegado a la Secretaría de Gobierno y una fiscal que no está dispuesta a decirle que sí a todos sus caprichos.

Leave a comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *