Clara muestra de la idolatría que los cuatroteros sienten por la isla aprisionada de Cuba, en la que no hay libertad, ni prosperidad, ni respeto a los derechos humanos, sólo una tiranía despiadada que sofoca la libertad de expresión, de pensamiento y de acción política, es que este Gobierno se ha dado a la tarea de traer a México a tres mil cien “médicos” cubanos, los cuales ha asignado a clínicas del “Bienestar” en 329 municipios de 24 Estados del País.
En nuestras universidades se están formando suficientes médicos, es más, tenemos miles de ellos desempleados, pero aun así los cuatroteros firmaron un convenio con el tirano Miguel Díaz-Canel para ir elevando el número de “médicos” cubanos que ha importado nuestro Gobierno. En este mes, superaron los 3 mil.
Y sí, entre esos 3 mil debe haber algunos médicos, pero dentro de ese grupo vienen también indoctrinadores, agitadores, cuya labor es sembrar ideas socialistas/marxistas/comunistas entre los campesinos y poblaciones marginadas del País, sobre todo en el Sur y Sureste. El Gobierno mexicano está trabajando de la mano con la tiranía cubana para preparar el camino para instaurar en México un Gobierno plenamente socialista.
No se sabe, porque la información está “reservada” bajo un manto de opacidad, cuánto le paga el Gobierno mexicano al cubano por este envío de “médicos”, pero sí que -entre otras cosas- le hemos regalado petróleo a Cuba, no vendido, porque Cuba no tiene ni sal para el aguacate, su economía está en ruinas, no les alcanza ni para papel de baño, ni electricidad y la comida la deben racionar.
No lo decimos de oídas, hemos estado ahí y constatado la miseria que predomina en la isla, que es la razón por la que hay más cubanos fuera de Cuba que en Cuba. De esto les echan la culpa la dictadura y sus simpatizantes a los norteamericanos, pero esto es una más de las muchas falsedades demagógicas de las tiranías “populistas”. Cuba está como está porque rehúsa adoptar las más básicas prácticas democráticas: los críticos del régimen son encarcelados.
Es con este Gobierno con el que el nuestro de la cuatrotería ha decidido hacer el “negocio” de importar “médicos”, que a la vez vienen con la consigna de propagar la ideología comunista en zonas rurales de México sobre todo en regiones -como Guerrero- en las que ha habido antes levantamientos y/o movimientos de insurgencia (Lucio Cabañas, por ejemplo).
No hay forma de justificar la presencia de 3 mil médicos cubanos en México, cuando tenemos un alto índice de subocupación o desempleo entre los graduados de medicina de nuestras universidades. Nuestros médicos son mejores que los cubanos, de manera que la “razón” para traerlos no tiene nada que ver con proporcionar un mejor servicio de salud.
No cuando hay carencia de medicinas, equipo médico, camas de hospital, quirófanos y etcétera. Sin medicinas ningún médico puede curar, de manera que la presencia de los “médicos” cubanos sale sobrando.
Su razón de estar aquí es otra, es ideológica, y lo demuestra la vomitiva apología que hiciera el mismísimo Presidente Saliente del guerrillero Che Guevara, responsable en Cuba -antes de que Castro lo mandara a que lo mataran en Bolivia- de los escuadrones de fusilamiento.
El Che, el pseudohéroe de los cuatroteros, daba la orden de FUSILAR a líderes obreros, periodistas, oponentes políticos, empresarios, hacendarios y en general a cualquier persona que les cayera gordo a los revolucionarios. ¡Éstos son los héroes de los cuatroteros!
Ha dicho el Presidente Saliente, el gran amigo del Gobierno cubano, que al dejar el Gobierno se irá a su finca en Palenque. Este su h. escribano de banqueta lo duda completamente: o se queda en la casa que tiene en México (el que fuese su cuartel de campaña) o se retira un rato -precisamente- a Cuba bajo la protección de sus cuates, los carceleros de la Isla.
Sobre todo si es que llegase a pasar que se le fincara alguna acusación derivada de la captura de “El Mayo” de que él o sus simpatizantes financiaron sus campañas políticas con dinero del narcotráfico. Mucho tenemos de qué preocuparnos.