“Lo que me importaba era disfrutar el correr, no ganar”.

Ésta es la frase que más me gustó de la entrevista que le hace Sabina Berman, en Largo Aliento, a Yulisa Fuentes Bustillo, la corredora rarámuri, que junto con otras 5 mujeres, quedaron en tercer lugar de la carrera “Speed Project” de Las Vegas, en abril de este año.

Este gran logro se realizó con el apoyo del equipo “Ra, ra, ra” liderado por Beba Guzmán, otra corredora amateur, quien compitió en la misma carrera en 2022, en el primer equipo de mujeres mexicanas en hacerlo.  Ella es también, Productora audiovisual y está armando, un documental sobre su triundo, que estará listo el próximo año.  El equipo campeón estuvo conformado por:  Rosa Ángela Parra (29 años, cuñada de Yuli),  Argelia Orpinel (40 años), Isidora Rodríguez (46 años, doble campeona del Maratón Jebla y ya es abuela), Lucía Nava (27 años, vive en Chihuahua) y Verónica Palma (34 años, vive en Cd. Juárez), además, claro, de Yulisa (26 años).  Ellas corrieron 550 kilómetros en 52 horas y 22 minutos, es decir, cada una corrió más de 90 kilómetros… y la ruta se considera extrema porque, además de la distancia, tienen que atravesar el borde del Desierto de Mojave y del Parque nacional del Valle de la Muerte.  Es realmente admirable lo que logran estas mujeres y también los hombres, con este don especial que tienen para correr descalzos o con guaraches.  Ell@s son parte del grupo étnico conocido como Tarahumaras, pero la gente los llamamos, Rarámuris, que viene de su lengua, “rara” que significa “pie” y “muri” que es “correr”, es decir, “corredores de a pie” o “pies ligeros”.

Yulisa es de un pueblo llamado Choguita, municipio de Guachochi, en Chihuahua.  Ella dice que es de “la alta Tarahumara” y tarda 3 horas en camión de bajar de ahí, hasta la cabecera municipal y para Chihuahua son 5 horas más.  Analiza que posiblemente como necesitan caminar tanto en la sierra, desde niñ@s, eso les da la costumbre de hacerlo, además del estímulo de sus familias para las competencias.  Ella dice que no hizo un entrenamiento formal, como tal, sino que si había caminado mucho un día, ya no corría sino hasta el día siguiente.  

Lo típico es que l@s corredor@s rarámuris, corran con sus sipuchakas (faldas tradicionales) y guaraches o descalz@s.  No lo hacen con la blusa tarahumara, porque la tela y los hilos le lastiman sus “éstas” dice ella, mientras se roza el busto.  Y aunque es muy difícil correr descalzos o con guaraches, se sienten más ligeras, y además, no sufren de caídas de uñas o daños a sus dedos, como les suele pasar a l@s que usan tenis.  Yulisa solo usó tenis al salir de Los Ángeles porque sentía frío en sus pies. 

Las 6 corredoras ya se conocían pero nunca había corrido juntas porque las carreras rarámuris son individuales. De las 6, 2 no saben usar el celular.  Cuando le dicen que:  “-¿Tienes tu página en Facebook?-“ “-No lo sé–“  contesta ella. 
Ante la pregunta de:  “-¿Cuál es tu estrategia?-“  Ella contesta que:  “-No me gusta ni empezar recio ni tan despacito cuando arranco.  Y cuando me canso, sigo corriendo y corriendo-“ . “-Mi mayor logro es el ganar la carrera Rarámuri de 63 km, en la que corrí 9 horas sin parar-“.

“-¿Disfrutas el paisaje aún con la prisa de ganar?-“  A lo que Yuli, contesta:      “-No pienso en ganar, solo en disfrutar el correr. Trato de disfrutar el paisaje, más que nada.  Cuando me canso, quiero seguir haciéndolo-“. 
 “-¿Qué se siente ganar?-“  “-Se siente bonito-“ es la respuesta “-Y me da gusto que me felicite mi familia-“.    
 “-¿Te han ofrecido que corras con alguna marca de ropa o de tenis?-“  “-No, nadie me ha ofrecido… y me sentiría muy incómoda con la ropa entallada… no creo que mejoraría mi tiempo.-“
“CONADE”…  no saben ni qué es eso porque no les ayudó en nada;  ni antes, ni después.  No son las primeras deportistas que les pasa esto, aún las más prominentes, dice Sabina.  La gobernadora de Chihuahua ni les habló, los únicos que los apoyaron fueron Banco Azteca y Michelob ultra, un “grant” que la carrera da a quienes lo necesitan, pero al igual hicieron una campaña donadora y el gobierno municipal de Guachochi, también los ayudó con traslados y trámites para sacar los pasaportes y visas.

El nombre del equipo “Ra-ra-rá” surgió por las porras mexicanas y haciendo alusión a “Rarámuri”.  Pegó mucho y las siguieron mucho en redes sociales, eso fue lo más importante… lo que las hizo famosas.  Beba buscó a 6 mujeres rarámuris, para aprovechar sus habilidades, por marca, y porque quería que vivieran la experiencia de correr en equipo y fuera del país.  “Speed Project”, es una carrera “rebelde”, no hay reglas, es llegar del punto A, en Los Ángeles, al punto B, en Las Vegas.  Es una carrera en el que si te para la policía debes decir que vas corriendo con tus amig@s por gusto.  Llevaban un equipo de logística que decidía quién corría el relevo y la ruta;  una casa rodante donde descansan y comen, un vehículo que seguía a la corredora, otra persona que cuidaba que estuvieran hidratadas y que su condición física siguiera bien.  

Una parte que me dio mucha ternura y me hizo pensar en lo importante que es la empatía en cualquier  grupo humano, es cuando le preguntan que si ya conocía el mar, y Yulisa dijo que sí, pero que le daba miedo;  pero que esta vez que fue con el grupo de “Ra, ra, rá”, se le quitó el miedo, porque la tomaron de la mano para que lo tocara.

¡Qué interesante, ¿verdad, querid@s lector@s?.  ¡Realmente un gran orgullo como mexican@s y un buen ejemplo a seguir!.

Mari Aguado de Cuadra

JRL 

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