El edificio Márquez es uno de los inmuebles particulares con mayor tradición e historia en Pachuca.

Se erige imponente en céntrica calle de Miguel Ramos Arizpe esquina con el viaducto Río de las Avenidas.

MAR DE HISTORIAS

Sus muros albergan decenas de historias de las familias que vivieron bajo su techo.

Los antiguos departamentos ahora funcionan como estancias temporales, tanto económicas como de lujo.

DESDE LA DÉCADA DE LOS 50

De acuerdo con la página oficial de las estancias EDM, el edificio Márquez inició su construcción los albores de la década de los años 50.

Los primeros departamentos tienen una altura de 3.30 metros, apegados a los estándares de la época para dar sensación de amplitud.

Al continuar la construcción del edificio la altura se redujo a 2.20 metros, medida más acorde con la época moderna.

EL DOCTOR MÁRQUEZ

El edificio fue propiedad del doctor Andrés Márquez “connotado catedrático de la Escuela de Medicina de la Universidad Autónoma de Hidalgo y prestigioso cirujano que prestó sus servicios en la famosa clínica Mayo, de Houston Texas”, según describió en una crónica el renombrado periodista Anselmo Estrada Alburquerque.

LA ESTATUA DE NEPTUNO

Precisamente entre los imponentes muros del edificio se encuentra la estatua del mítico Neptuno cuyo origen fue reseñado magistralmente por el desaparecido comunicador.

EDUCADOR Y CONSTRUCTOR

El doctor Márquez se dedicó a ejercer la medicina y a la enseñanza, pero la construcción también fue su pasión, describen los administradores del inmueble.

Demoró alrededor de 30 años en construir el edificio que hoy se observa muy firme en el centro histórico de Pachuca.

CERRADO POR AÑOS

En marzo de 1997 el doctor Andrés Márquez falleció y el inmueble ya había cerrado sus puertas al público desde principios de la década de los noventa.

Pero transcurridos unos años se decidió volver a ocupar el inmueble y se iniciaron trabajos de remodelación como estancias a partir del 2004.

 

ALOJAMIENTOS TEMPORALES

En entrevista para AM Hidalgo, uno de los encargados de administrar el inmueble informó que disponen de tres servicios de alojamiento.

Los precios son diversos desde 150 pesos por persona hasta 3 mil 800 pesos la noche de nueve personas.

Así el edificio que estuvo abandonado varios años tomó su segundo aire pues se cumplen 20 años de su reapertura.

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